Saca de las Yecuas

Unos 1.300 equinos saldrán de la marisma de Doñana en la Saca de las Yeguas: una tradición de más de 500 años

Saca de las Yeguas en Almonte (Huelva) en una imagen de archivo
Saca de las Yeguas en Almonte (Huelva) en una imagen de archivo. Asociación de Ganado Marismeño
  • La aldea de El Rocío acogerá una vez más el traslado de unas 1.300 yeguas y potros desde las marismas de Doñana hasta Almonte

  • Se trata de una de las tradiciones más antiguas de Andalucía ya que en este 2025 cumple 521 años de vida

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HuelvaLa Asociación Nacional de Criadores de Ganado Marismeño y el Ayuntamiento de Almonte (Huelva) han presentado la programación ligada a la Saca de las Yeguas 2025. Una cita que tiene lugar cada 26 de junio cuando las yeguas y potros salen de Doñana para permanecer en el municipio onubense, que se convierte en epicentro de las faenas marismeñas. El presidente de la asociación, Diego Díaz, ha destacado que este año se espera la llegada de unas 1.300 cabezas de ganado, pertenecientes a la asociación, con cerca de 700 socios.

El alcalde de Almonte, Francisco Bella, ha agradecido el "compromiso" de la asociación y ha puesto en valor que la "raíz milenaria" de estas faenas, "como atestiguan documentos del siglo X hallados de la mano del conservador de Medina Azahara, Antonio Vallejo, donde ya se mencionan registros de traslado de ganado desde Doñana a Córdoba, confirmando la antigüedad de esta práctica".

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Entre las menciones recogidas, figura el topónimo al-Munt, vinculado históricamente con Almonte, donde ya entonces existía una fortaleza y una comunidad que se dedicaba al cuidado y la conducción del ganado. El primer edil también ha anunciado la nueva edición del concurso fotográfico 'Saca de las Yeguas 2025', con el objetivo de dar difusión visual de esta tradición.

Fuertes medidas de seguridad

El presidente de la Diputación de Huelva, David Toscano, ha destacado la aportación de cinco desfibriladores para "reforzar la seguridad" durante la Saca, destacando que "la marisma es un entorno de difícil acceso y debemos estar preparados ante cualquier emergencia".

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La delegada de Turismo, Cultura y Deportes de la Junta de Andalucía en Huelva, Teresa Herrera, y el director del Espacio Natural de Doñana, Juan Pedro Castellano, también han subrayado el valor medioambiental y cultural de esta actividad ganadera, que se convierte en "un espectáculo único cada mes de junio".

Desde la asociación se ha hecho balance del último año, en el que hubo que hacer frente a "importantes retos logísticos y sanitarios" a causa de las inundaciones, que coincidieron además con la época de partos, "mermando la cría de potrillos". Aun así, se ha puesto de manifiesto la "capacidad de adaptación" de los yegüerizos, así como "el respaldo recibido por parte de las instituciones".

Con la mirada puesta en la próxima semana, cuando comiencen las labores de la Saca de las Yeguas, el presidente de la Asociación de Criadores de Ganado Marismeño ha reafirmado el valor de estas faenas como "símbolo de sostenibilidad, identidad colectiva y armonía con el entorno". Una cita que, ha destacado, "va mucho más allá del espectáculo", ya que "es la expresión de siglos de historia y un ejemplo de compromiso con las raíces".

La historia de la Saca de las Yeguas

Existen documentos del año 973, donde bajo el califato de al-Hakam II, el cronista Ibn Hayyan dejó constancia de cómo potros y potrancas criados en las marismas de Sevilla y Niebla, territorio que hoy conforma la provincia de Huelva, eran conducidos hasta la corte califal de Córdoba, donde su presentación ante el califa y el príncipe Hisam causó admiración.

Entre las menciones recogidas, figura el topónimo al-Munt, vinculado históricamente con Almonte, donde ya entonces existía una fortaleza y una comunidad que se dedicaba al cuidado y la conducción del ganado. Si bien estas fuentes ya habían sido estudiadas e incluso publicadas en ámbitos académicos, no habían recibido hasta ahora una amplia difusión pública.

Ahora, a través de la Diputación de Huelva, se ha editado un tríptico que estos días se reparten para dar difusión a esta información. Son documentos investigados por el conservador de Medina Azahara, Antonio Vallejo, quien identificó estas referencias en crónicas árabes del siglo X.