Un policía mata a tiros a un perro que "ponía en peligro" a muchos vehículos de la A-7 en Tarragona
Un agente de la Guardia Urbana de Tarragona mató a tiros por la mañana a un perro que se encontraba suelto en la autovía A-7
La policía cortó el tráfico de manera intermitente en ambos sentidos debido a que el animal cambiaba de calzada
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Un agente de la Guardia Urbana de Tarragona mató a tiros el domingo por la mañana a un perro que se encontraba suelto en la autovía A-7 porque "ponía en peligro" a los vehículos que circulaba por la vía, informa la policía tarraconense en un comunicado este lunes.
El suceso tuvo lugar sobre las 08.30 horas, cuando la Guardia Urbana recibió el aviso de los Mossos d'Esquadra de que había un perro en el punto kilométrico 1.160, en dirección Valencia, que entorpecía el tráfico en un tramo mojado de la carretera y obligó a varios vehículos a hacer maniobras peligrosas para esquivarlo. La policía cortó el tráfico de manera intermitente en ambos sentidos debido a que el animal cambiaba de calzada y sentido con movimientos rápidos y erráticos.
El Ayuntamiento de Tarragona ha publicado un comunicado en su perfil oficial de la red social 'X' en el que han informado de lo sucedido y han pedido disculpas por la muerte del animal, alegando que los hechos se han producido por necesidad de mantener la seguridad vial: "Desde la Guardia Urbana lamentamos el desenlace de los hechos ocurridos, manifestando que nuestro trabajo es velar por la seguridad de la ciudadanía en todo momento. Sin embargo, como en todos los casos que se hace uso del arma reglamentaria, se ha abierto diligencias informativas".
El perro intentó moder a un agente y huyó
Según la Guardia Urbana, en un momento en el que la circulación estaba restablecida, el perro cruzó la vía y obligó a un conductor a efectuar una maniobra brusca que puso en peligro a un agente que se encontraba en el arcén. Es mismo policía trató de atrapar al perro, pero el animal intentó morderle y huyó.
Tras cinco intentos fallidos para capturarlo y tras valorar que "suponía de manera reiterada un grave peligro para los usuarios de la vía", la policía tomó la decisión de abatirlo, siguiendo lo que dicta la ley 16/1991 de las policía locales, y un agente le disparó con su arma reglamentaria. La Guardia Urbana asegura que lamenta lo sucedido, pero que su trabajo es "velar por la seguridad de la ciudadanía en todo momento". La policía ha abierto diligencias informativas como en todos los casos en los que se usa el arma
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