El iceberg A68a se fractura en cuatro y sigue su rumbo a Georgia del Sur

  • El iceberg A68a ha dejado de ser el más grande del mundo al fraccionarse en 4

  • Actualmente tendría todavía alrededor de 2.600 km2 de superficie

  • Los satélites vigilan la trayectoria de los icebergs por la amenaza para Georgia del Sur

El iceberg A68a que solía ser el más grande del mundo ha dejado de serlo definitivamente. Al pedazo que se desgranó la semana pasada, del tamaño de Sevilla, se han sumado otro dos. Los tres nuevos icebergs han sido bautizados A68d, A68e y A68f. Los investigadores siguen sin quitar ojo a los bloques de hielo ante el peligro de que sigan su rumbo a Georgia del Sur y causen una devastación masiva de su fauna única.

Las imágenes obtenidas en los últimos días por los satélites de Copernicus Sentinel-1 muestran cómo lo que eran grietas inicialmente se ha convertido en varios trozos que se irán separando poco a poco de A68a. La superficie de los icebergs recién nacidos sería, aproximadamente, de 144, 655 y 225 kilómetros cuadrados, según la especialista en SIG (Sistema de información geográfica) y cartografía del British Antarctic Survey, Laura Gerrish.

A68a, por su parte, seguiría teniendo una extensión de unos 2.600 kilómetros cuadrados, es decir, todavía hablamos de un bloque de hielo gigantesco.

"Por el momento, todos los fragmentos de témpanos están arrastrados por una corriente de agua de rápido movimiento conocida como Frente de Corriente Circumpolar Antártica Sur. Es probable que esto barra los trozos alrededor de la isla y luego los arroje al norte", publica la 'BBC'.

El iceberg 'padre', en cambio, sigue siendo una amenaza que, en caso de desembarcar en aguas poco profundas de Georgia del Sur, supondría un importante declive en las poblaciones de focas y pingüinos de la isla.

La odisea del iceberg A68a

El viaje de A68a ha sido un no parar desde que se desgajó de la plataforma de hielo Larsen C el 12 de julio de 2017. Casi inmediatamente después de separarse, se formó A68b, y A68c lo hizo en abril de 2020.

“De manera bastante poco romántica, los icebergs antárticos se nombran a partir del cuadrante antártico en el que se avistaron originalmente, luego un número secuencial, luego, si el iceberg se rompe, una letra secuencial”, ha explicado la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés).