Cada vez es más frecuente verlos. Son los peces globo 'Lagocephalus lagocephalus'. No son nuevos en las Canarias, pero los científicos del IEO han advertido de que cada vez hay más. El organismo, sin embargo, no tiene muy claras los motivos de este aumento: "las razones no son fáciles de explicar, aunque parecen ser motivadas por procesos naturales de deriva o dispersión de sus poblaciones", explica en una nota Pedro J. Pascual Alayón, investigador del Centro Oceanográfico de Canarias del IEO.
Esta especie tiene un carácter pelágico muy acentuado y se distribuye por todo el océano, es muy voraz y se desplaza formando grandes bancos que pueden ser avistados tanto en alta mar con en zonas de costa, según ha alertado en el informe el IEO.
No es la primera vez que hay un aviso por la presencia de estos peces. En octubre de 2014, el Ministerio de Agricultura difundió un aviso en el que advertía la presencia en aguas del Mediterráneo de una especie de la misma familia de peces globo, la especie era 'Lagocephalus sceleratus'.
En total, se han contabilizado hasta cuatro especies distintas de pez globo tóxico: tamboril ('Sphoeroides marmoratus'), tamboril azul o gallinita ('Canthigaster rostrata'), tamboril de hondura ('Sphoeroides pachygaster') y 'Lagocephalus lagocephalus'.
¿Cuáles son las consecuencias de ingerirlo?
Los efectos son instantáneos y afectan directamente al torrente sanguíneo, reduciendo el número de células rojas. Además, una vez guisado, dicha agua es más tóxica que el propio pescado fresco.
Por eso, si vives en Canarias y eres aficionado a la pesca, o llega a tus manos desde cualquier parte de España, ya lo sabes: no lo comas y avisa de su peligrosidad.