Las granjas de visones, en el punto de mira por ser un posible foco de mutación del coronavirus

  • Los visones pueden infectarse del SARS-CoV-2 y el virus ha mutado en estos animales

  • El 73% de las granjas de visones en Europa se han cerrado y miles de visones han sido incinerados

  • En España, de 29 granjas al inicio de la pandemia, continúan activas 26

Las granjas de visones en Europa están en el punto de mira de las autoridades sanitarias del continente por haberse demostrado que son un foco del coronavirus SARS-CoV-2. En Europa, solo en el año 2020 se han cerrado más del 73% de las explotaciones de estos animales y varios países han prohibido su explotación. En España, solo se han cerrado tres granjas desde el inicio de la pandemia. 26 explotaciones siguen activas en nuestro país.

Se han detectado más de 400 brotes del virus causante de la covid19 en granjas peleteras de visón americano, el mas común en esta industria. Además, las condiciones de los animales en este tipo de explotaciones suele favorecer el contagio de animal a animal, y que las jaulas suelen estar juntas, dispuestas en hileras. El peligro de estos focos de son las mutaciones y el salto a los humanos de nuevas variantes de la infección.

Desde hace un año se sabe que los visones pueden infectarse con el SARS-CoV-2. El virus se había transmitido de los humanos a los visones de granja y había mutado en los animales infectados. Las mutaciones se produjeron en la proteína spike, que es crucial para la entrada del virus en las células del huésped y representa el punto central de ataque de los anticuerpos.

Los visones, fuente de nuevas variantes del virus

Ahora, investigadores del Centro Alemán de Primates han demostrado que un anticuerpo utilizado para el tratamiento con covid19 es incapaz de inhibir eficazmente el SARS-CoV-2 que alberga una mutación en espiga adquirida en los visones. Además, la mutación redujo la inhibición del virus por parte de los anticuerpos producidos en humanos infectados por el SARS-CoV-2.

Estas variantes del SARS-CoV-2 procedentes del visón se transmitieron a los humanos, lo que hace temer que los visones puedan ser una fuente continua de infección de los humanos con variantes del SARS-CoV-2 con propiedades biológicas alteradas.

En abril de 2020, los visones de las granjas de visones holandesas desarrollaron una enfermedad respiratoria debido a la infección por el SARS-CoV-2, que se transmitió de los trabajadores de la granja infectados a los animales. El virus mutó en los visones y surgieron diferentes variantes del virus, que se transmitieron a los trabajadores de la granja y luego también se transmitieron de persona a persona. Esta observación también se hizo en Dinamarca y se mataron millones de visones para evitar la transmisión de nuevas variantes a los humanos.

La proteína spike de la envoltura del SARS-CoV-2 es la responsable de la entrada del virus en las células en las que se replica. Estos científicos han estudiado las mutaciones detectadas en la proteína pico del SARS-CoV-2 del visón, entre ellas la mutación Y453F. Los investigadores querían averiguar si esta mutación afecta a la inhibición del virus por parte de los anticuerpos que se utilizan para la terapia de COVID-19 o que se producen en los pacientes de covid19.

"Nuestros resultados muestran que uno de los dos anticuerpos de un cóctel de anticuerpos utilizado para la terapia de covid19 ya no inhibe eficazmente la variante viral con la mutación Y453F. Además, nuestro estudio demuestra que la mutación Y453F reduce la inhibición del virus por los anticuerpos producidos por los pacientes de covid19. Esto significa que las personas infectadas por el SARS-CoV-2 pueden tener una protección reducida contra las variantes de visón del virus", explica Markus Hoffmann, primer autor del estudio, que se ha publicado en la revista 'Cell Reports'.

Por lo tanto, parece que que el SARS-CoV-2 puede mutar en los visones de forma que se reduzca el control inmunitario por parte de los anticuerpos. Actualmente no está claro si esto también es posible en otros animales a los que el virus puede ser transmitido por individuos infectados.