Lavar las sábanas puede llegar a resultar un engorro, sobre todo en los días en los que la lluvia y la humedad dificultan su secado. Es por eso que muchas personas optan por meter las sábanas en secadoras domésticas o en las industriales que hay a un precio asequible en muchas tiendas repartidas por toda España. Sin embargo, todos los que deciden acudir a una secadora se encuentran casi siempre con el mismo problema: las sábanas acaban totalmente arrugadas y parecen una gran masa enorme.
¿Cómo solucionarlo? Pues hay expertos en limpieza que tienen la solución. Lo primero que hay que hacer es meter unas pelotas de papel de aluminio dentro del electrodoméstico. "Así se secan mejor y no se quedan arrugadas", aseguraba hace unos días una usuaria en redes sociales en un vídeo que se hizo viral.
El truco es muy sencillo, solo hay que hacer tres bolas de papel de aluminio del tamaño de una mano y meterlas en la lavadora cuando el programa de lavado haya terminado, justo antes de proceder a poner el de secado.
El objetivo principal es proteger las prendas, ya que muchas veces se estropean durante el lavado y especialmente el secado, donde hay más electricidad estática. Al estar en contacto todas las prendas se electrifican y pueden provocar que nuestra ropa se rompa y su tiempo de vida acabe antes de lo previsto.
De este modo, el truco de las bolas hechas de papel de aluminio eliminará la electrificación de nuestras prendas, ya que el aluminio es un metal que puede conducir el calor y no se magnetiza. Un remedio casero perfecto para alargar la vida de la ropa.
Lo bueno de este truco es que el papel de aluminio no es nocivo para la salud, ni tampoco provocará daños en ningún electrodoméstico ni en la ropa. Además, las bolas de aluminio se podrán usar alrededor de unos seis meses.
Otra buena manera para evitar que las prendas se electrifiquen es usar también suavizante en los lavados, así como programas cortos de centrifugado, junto al truco de las bolas de aluminio.