Ni amenazas ni críticas paran el concierto de Juanes en Cuba

INFORMATIVOS TELECINCO 18/09/2009 11:00

Juanes ha defendido, desde que anunció la celebración del concierto, que el arte es un "arma poderosa de paz", pese a que ha sufrido críticas y amenazas, que asegura "aceptar y entender", aunque temió por su familia. Ha llegado a denunciar en Miami, donde reside, amenazas que le han llegado a través de anónimos.

En el concierto, que también organiza Miguel Bosé, actuarán 14 artistas, entre ellos Víctor Manuel, Luis Eduardo Aute, los puertorriqueños Olga Tañón y Danny Rivera, el ecuatoriano Juan Fernando Velasco, el italiano Jovanotti, los cubanos Amaury Pérez, Silvio Rodríguez, Los Van Van, Carlos Varela, X Alfonso y la banda cubano-venezolana Cucu Diamantes & Yerbabuena.

El rechazo ha sido escenificado por el exilio cubano que destruyó a golpe de martillo copias de discos del artista colombiano y quemó una camisa negra, en alusión a la famosa canción de Juanes. Para el exilio cubano en Miami, está la opinión de que Juanes ignora la realidad de Cuba y que el evento reforzará la imagen de los hermanos Fidel y Raúl Castro. Creen que debería ofrecer un concierto por la libertad de los cientos de presos políticos de la isla caribeña, por la convocatoria a elecciones y el respeto a los derechos humanos. El opositor cubano Oswaldo Payá, líder del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), sugirió a Juanes y a Bosé que en su pidan la libertad de los presos políticos en Cuba. "Juanes y Bosé deberían levantar la voz por la liberación de Regis (Iglesias) y de Tony (Díaz, miembros presos del MCL) y de todos los prisioneros de conciencia cubanos", señala en un comunicado.

Escenario simbólico

Será el segundo concierto del proyecto "Paz sin fronteras", que comenzó en 2008 en la frontera entre Colombia y Venezuela, y tendrá lugar en la Plaza de la Revolución de La Habana, escenario que, por su simbolismo, centra una de las principales críticas de parte del exilio cubano en Estados Unidos.

"Vamos a tocar ahí porque lo pedimos nosotros. Nadie de los gobiernos (La Habana, Washington) nos llamó para decir que tocáramos como sus títeres, sino que fuimos nosotros a proponer un concierto por la paz", explicó Juan Esteban Aristizábal, Juanes.

Según Miguel Bosé, este grupo de artistas no va a "hacer política, sino a intentar conseguir que la paz sea un derecho de todas las Constituciones del mundo". Bosé recordó que esta polémica "entra dentro de un conflicto histórico de 42 años y es insoportable". "El dolor estanca y no hace andar. Nosotros hemos decidido usar nuestras energías para deshacer el dolor. La Historia tiende a resolver todos sus conflictos y hemos decidido navegar con ella".

La presencia de Silvio Rodríguez

Ante la criticada presencia en el cartel de Silvio Rodríguez, considerado muy próximo al régimen cubano, Juanes confesó que fue una elección suya por la devoción que siente por su música desde la infancia. "Su obra es realmente increíble, la composición, la poesía... Valorar eso es importante, al margen de la persona", dijo.

Los primeros contactos para el concierto tuvieron lugar entre el ministro de Cultura cubano, Abel Prieto, y su homóloga colombiana, Paula Moreno, según relató Juanes, quien después aclaró su reunión con la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton. "Como colombiano, no tengo que pedirle ningún permiso. Pero sí por Olga Tañón y otros artistas residentes en Estados Unidos, gente del 'staff' técnico también, que lo necesitan para ir a Cuba", dijo.

El Gobierno cubano acusa a los "mercenarios" de la polémica

Del otro lado, el Gobierno cubano asegura que nadie conseguirá "boicotear" el concierto y que su escenario en la Plaza de la Revolución se va a "abarrotar" de público. El presidente del Instituto Cubano de la Música, Abel Acosta, dijo que “no tenemos ninguna duda de que nuestro pueblo va a asistir y con respeto, porque este es un pueblo culto”.

Asimismo, aludió a "mercenarios" (como las autoridades cubanas y medios oficiales califican a la disidencia interna) y cree que en "búsqueda de notoriedad" han intentado "boicotear" el concierto de Juanes. "Ahí hay una conexión muy clara y un eco de las pretensiones del núcleo fascista de Miami con mercenarios que hay aquí, a sueldo, que se sabe quiénes son y realmente no tienen ningún tipo de resonancia en la sociedad ni en nuestro pueblo, mucho menos en nuestros jóvenes", recalcó Acosta.