El primer Árbol de Navidad adornado con luces eléctricas del mundo se puso en Nueva York el 22 de Diciembre de 1882. Edward Hibberd Johnson, su creador, fue quien colocó en el Árbol de Navidad de su casa de Manhattan 80 bombillas rojas, blancas y azules. El primer árbol de Navidad del Rockefeller Center fue plantado en 1931 por los trabajadores que construían el complejo. Dos años más tarde se instaló el primer árbol oficial adornado con 700 luces.
El Árbol de Navidad del Rockefeller Center debe ser una picea abies de al menos 19,8 metros de altura y 10,6 metros de anchura que se encuentre en los últimos años de su ciclo de vida. El Árbol es donado al Rockefeller Center por su propietario. Cuando se retira es donado a la organización sin ánimo de lucro Habitat for Humanity, dedicada a construir y reparar casas de personas de pocos recursos económicos a través de trabajo voluntario y donaciones.
Este año de nuevo, su encendido ha inaugurado la época navideña. Un iluminado al que asistieron pocas personas por las restricciones del coronavirus. El resto pudo verlo por televisión. El abeto canadiense de casi 23 metros de alto y 11 toneladas de peso viajó 300 kilómetros hasta la Gran Manzana. Ilumina la ciudad de los rascacielos con más de 50.000 luces LED multicolor. Destaca la estrella de 3 millones de cristales Swarovski.
Solo Vigo y su alcalde, Abel Caballero, que pulsaba este miércoles el botón de encendido del alumbrado navideño se atreve con mucho humor a compararse con esta celebración. Caballero se muestra convencido de que el alcalde de Nueva York ve su encendido por streaming, no vaya a ser que le tomen la delantera. Este año, no obstante, el encendido de Vigo ha sido un acto discreto, casi íntimo, ante apenas un centenar de personas, deslucido por las restricciones sanitarias, económicas y sociales ligadas a la pandemia del coronavirus. Un anticipo de lo que pretende ser el elemento diferenciador de las Navidades de Vigo, el de la "seguridad covid 1.000 %", nuevo mantra de Caballero.