La actriz catalana Núria Espert regresa al Teatre Lliure de Gràcia con 'La violación de Lucrecia', un poema de William Shakespeare que afronta en solitario y en forma de monólogo, y que decidió intepretar, en parte, por su "sensibilización sobre la violencia machista".
El montaje, que se podrá ver en Barcelona desde este jueves hasta el 23 de octubre, narra el hecho criminal que acabó con el dominio de los reyes en Roma y que propició la instauración de la República romana, pero es, ante todo, el descarnado relato de una violación.
"La narradora empieza a relatar y poco a poco se va enajenando y llega un momento en que los personajes pasan a apoderarse de ella", ha explicado Del Arco sobre el rol de Espert, que será a la vez violada, violador, marido de la violada, rey y mensajero.
Espert afronta esos continuos cambios de personaje sin ayuda del vestuario o el maquillaje --"es una cosa muy complicada que tiene que parecer muy fácil"-- y es que el peso de la obra se basa en el virtuosismo interpretativo y en el dominio de la palabra, ha precisado el director.
'La violación de Lucrecia' se estrenó el año pasado en el festival Temporada Alta de Girona, y desde entonces ha recorrido toda España, con más de 100 funciones pero con muy pocos cambios.
El productor del espectáculo, Juanjo Seone, ha comentado este martes que fue la propia Espert la que pidió hacer la obra; él le propuso a directores consagrados como Mario Gas y Lluís Pasqual para que la dirigieran, pero ella prefirió apostar por alguien más joven.
Seone le recomendó entonces a Del Arco, que estaba cosechando un gran éxito de público y crítica en Madrid con 'La función por hacer' --con la que luego arrasaría en los premios Max--; Espert no se lo pensó y para el joven director fue un honor y una gran responsabilidad la oportunidad de dirigir a 'la Espert'.
LO PRÓXIMO, 'LA LOBA'
Para hacer 'La violación de Lucrecia' Espert dejó para más adelante encarnar a 'La Loba', la obra de Lilian Helman que está a punto de retomar: la estrenará en abril en el Teatro María Guerrero de Madrid dirigida por Gerado Vera, en la que será su despedida del Centro Dramático Nacional (CDN).
"Comparado con esto 'La Loba' me parece lo más fácil del mundo", ha bromeado la actriz, satisfecha porque, a pesar de que a lo largo de su dilatada carrera ha cometido los crímenes más atroces sobre el escenario, ahora por fin encarnará a una mala de verdad.
"Ella es como de Lehman Brothers, tiene la misma mentalidad que tienen ellos. Es una joya", ha resumido.