La modelo Miranda Kerr se casó con el confundador de Snapchat, Evan Spiegel el pasado 27 de mayo. Pero hasta el momento, pocos detalles habían trascendido sobre el enlace, salvo que empezaron haciendo yoga para liberar tensiones, que bailaron al ritmo de ‘When You Wish Upon a Star’ y que Kerr le recitó unos versos de Shania Twain en You're Still the One.
La ceremonia, que se ofició en el jardín de su casa, era toda una incógnita. Ni los recién casados ni los amigos de la pareja, hicieron públicas imágenes del enlace en las redes sociales, pero la edición americana de Vogue USA ha revelado el gran secreto de Miranda Kerr: el vestido.
Según el citado medio, la modelo fantaseó con su vestido, que quería que fuera una reinterpretación del que llevó Grace Kelly en su boda con Rainero de Mónaco.
"Un vestido que te cubre completamente crea una sensación de pureza y misterio", contó el exÁngel de Victoria's Secret a la publicación sobre su vestido, de manga larga, con cuello a la caja y mucho volumen. Se trata de un vestido de princesa que poco tiene que ver con lo que acostumbra a llevar.
"Me he divertido mucho con la moda, y solía ser más salvaje, libre, bohemia. Pero en este período de mi vida, mi estilo es más retraído. Mis mayores fuentes de inspiración siempre han sido Grace, Audrey Hepburn y mi abuela, que a los 80 años tiene una elegancia sin esfuerzo y se viste con un pantalón, una blusa blanca, una bufanda, un tacón bajo", aclaró Miranda Kerr.
Orlando Bloom, el gran ausente en la boda
Miranda Kerr y Orlando Bloom, que se casaron en 2010, pusieron fin a su relación en el año 2015. Aunque el actor no fue al enlace su expareja con Even Spiegel, si lo hizo Flynn. El pequeño de seis años, fruto del matrimonio entre la modelo y Orlando Bloom, desempeñó un papel muy importante en la ceremonia.