¿Cuál es la edad máxima para pedir una hipoteca en España?

Si estás pensando en solicitar una hipoteca para comprar una vivienda, seguro que te preguntas cuáles son los requisitos que te pedirán las distintas entidades bancarias para concederte este tipo de préstamo. Lo cierto es que el abanico de condiciones hipotecarias que ofrece la banca va variando en función del ciclo económico y de las circunstancias de cada momento.

Eso explica que, por ejemplo, las hipotecas a tipo variable sean menos populares en la actualidad, ya que se asocian a un mayor riesgo en pleno escenario de inflación. El resultado es un encarecimiento de las hipotecas a tipo fijo (más seguras) frente a un abaratamiento de las hipotecas a tipo variable. Pero no siempre ha sido así... ni se mantendrá este escenario indefinidamente. En el caso concreto del factor edad, ¿cuál es la edad máxima para pedir una hipoteca en España?

¿Cuál es la edad máxima para pedir una hipoteca en España?

La edad es uno de los elementos que tienen en cuenta las entidades bancarias a la hora de conceder un préstamo hipotecario y de definir su duración máxima. Aunque no existe una prohibición normativa en este sentido, normalmente el límite se establece en torno a los 75 años, aunque ello dependerá exclusivamente de la voluntad de cada banco y de su política al respecto en cada momento. Este límite tiene que ver con el riesgo en materia de salud y supervivencia asociado a una avanzada edad, que se traduce en un mayor riesgo de impago.

Por eso, debes tener en mente dos límites distintos en cuanto al plazo de amortización de tu hipoteca. De un lado, existe un plazo máximo vinculado a cada tipo de oferta hipotecaria concreta (por ejemplo, las hipotecas a tipo fijo no suelen superar los 25 años, mientras que las hipotecas a tipo variable pueden llegar hasta los 40 años de financiación). De otro, por mucho que la oferta seleccionada permita un máximo de 40 años como plazo genérico de devolución del préstamo, tu edad operará como límite extra, 'acortando' este máximo y llevándolo hasta el momento en que se cumplan tus 75 años.

En general, cuanto mayor seas en el momento de solicitar tu hipoteca, menor será el plazo máximo de amortización del que podrás disfrutar.

Además, es posible que tu banco te exija contratar un seguro de vida, o bien ofrecer el aval de una persona de menor edad. Eso sí, tu avanzada edad puede jugar en tu favor en otros sentidos: si cuentas con una estabilidad económica y unos buenos ahorros, ganarás punto como solicitante, ya que tu perfil de pagador será más seguro que el de una persona más joven pero con menos estabilidad y recursos.

Por último, tal y como recuerda Bankinter, aunque cada caso se estudia de forma particular, es importante que tengamos en cuenta las recomendaciones del Banco de España a la hora de solicitar un préstamo hipotecario. Estas recomendaciones aconsejan no superar los 30 años como plazo máximo en una hipoteca y evitar destinar más del 35 por ciento de nuestros ingresos mensuales a su pago.