Nuevo programa de ahorro y privatizaciones en Grecia para recortar el déficit

AGENCIA EFE 15/04/2011 08:22

El enésimo paquete de austeridad tiene dos pilares principales, el primero de los cuales consiste en 26.000 millones de euros por recortes de gastos de las empresas y la administración pública y aumentos de ingresos, mediante reformas impositivas y lucha contra el fraude fiscal.

Buena parte de ese ahorro procederá de la disminución del número de funcionarios a un ritmo de un 10 por ciento anual, mediante la reducción de nuevas contrataciones y la introducción de modelos de contratos temporales en los servicios públicos.

Paralelamente, la jornada laboral aumentará de 37 a 40 horas semanales.

También se aplicarán "tijeretazos" a los gastos de Defensa y la Sanidad pública, así como a los costes salariales de la función pública, que se reducirán en unos 2.000 millones de euros, equivalentes al 0,9 por ciento del PIB.

De esos 26.000 millones, 3.000 procederán de "medidas correctivas" pendientes de ser aplicadas este año.

El otro pilar del programa contra el déficit se refiere a los planes para recaudar 50.000 millones de euros mediante la venta total o parcial de empresas públicas en los próximos cinco años.

Así, el Estado pondrá a la venta acciones de la compañía estatal de comunicaciones y reducirá del 51 al 34 por ciento su participación en la empresa pública de electricidad.

La Lotería, el aeropuerto internacional de Atenas, los casinos o la empresa de gas natural son otros ejemplos de propiedades que serán parcialmente privatizadas.

En esa estrategia se incluye la venta o alquiler de patrimonio inmobiliario del Estado, por ejemplo de parte de las instalaciones deportivas construidas para los Juegos Olímpicos de Atenas en 2004.

El nuevo paquete de austeridad, del que aún quedan por conocer detalles, sale a la luz cuando se espera que Grecia reciba 12.000 millones de euros, el quinto tramo del crédito internacional de 110.000 millones de euros concedido por la Eurozona y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para evitar la bancarrota del país.

"No necesitamos reestructurar la deuda, sino que debemos reestructurar el país", aseguró hoy el jefe del Gobierno griego, Yorgos Papandréu, tras el Consejo de Ministros que aprobó las nuevas medidas.

Y es que en los últimos días han vuelto los rumores de que el país tendrá finalmente que reestructurar su deuda pública, la cual alcanzará este año el 153 por ciento del PIB, la mayor de toda la Unión Europea.

Está previsto que el Parlamento ratifique el plan de choque en mayo, gracias a la mayoría de que goza el gobernante Partido Socialista.

"Esta es la batalla que hemos estado librando los últimos 18 meses y es la que seguiremos librando hasta el final de nuestro mandato", aseguró el jefe del Gobierno.

El Ejecutivo griego lleva ya un año inmerso en una dura política de ahorro, con aumentos de impuestos y reformas laborales, de las pensiones y de la fiscalidad para tratar de contener la cifras de la deuda y del déficit.

Si en 2009 el déficit fue del 15,6 por ciento del PIB, este año se quiere llegar al 7,4 por ciento y el Gobierno griego insiste en que las reformas y el plan de ahorro permitirán rebajarlo al 1 por ciento en 2015.

La estrategia de austeridad ha sido duramente contestada en la calle por los sindicatos, que han organizado nueve huelgas generales desde 2010.

Las principales organizaciones obreras han convocado un nuevo paro para el mes de mayo, en protesta por unas medidas que, consideran, han provocado caídas del 6 por ciento del PIB y un aumento del paro hasta el 15 por ciento.