Va a ser un nuevo quebradero de cabeza para cuadrar las cuentas. La subida de la luz en la tarifa regulada por el Gobierno será de un 10% para un usuario medio: 300 kwh al mes con una potencia instalada de 4 kw. ¿Qué es lo que lo ha provocado? La subida del gas, de los precios de las materias primas y los derechos de emisión de C02 son las causas principales. El hecho de que en los últimos meses la energía hidráulica se oferte al precio de la producida con gas natural tampoco ayuda.
La realidad es que los precios de la electricidad han marcado récord tras récord en agosto (70,99 euros Mwh en el día de ayer) y el mes va a cerrar con un precio medio de entorno a 64 euros Mwh. Estos datos suponen una subida de un 35% de subida respecto al mismo mes de 2017.
El Gobierno lo ha reconocido, en declaraciones a la Cadena SER. Pero el secretario de estado de energía, José Domínguez Abascal, no ve la forma de solucionarlo a corto plazo. Su argumento es que las reglas europeas apenas dejan margen para cambiar el funcionamiento de un mercado mayorista controlado por muy pocas empresas. Las oscilaciones de precios seguirán.
Este aumento se reflejará en el precio regulado de la luz (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor o PVPC), una de las partes de la factura de la electricidad junto con los impuestos y los peajes. El recibo de la luz puede tocar máximos. Un consumidor medio con 4,4 kilovatios (kW) de potencia contratada y un consumo anual de 3.500 kilovatios a la hora (kWh) pagará este año 796 euros de luz, tres euros más que en 2012 cuando se registró el récord anterior (793 euros), según los datos del consultor energético y analista del mercado eléctrico, Francisco Valverde.