Zubiaurre ha repasado, en una entrevista a Efe, la actualidad política y económica española, marcada por una parte, por el alto el fuego de ETA y la apuesta de la izquierda abertzale por las vías políticas y democráticas, y por otra, por la crisis económica, que azota prácticamente a todos los sectores.
El presidente de los empresarios guipuzcoanos reconoce que en el entorno de ETA se perciben "cambios" que parecen "favorables para que, de una vez por todas, este país pase página", desaparezca un "fenómeno violento, intolerante y absolutamente anacrónico" y se resuelvan las "lógicas diferencias y problemáticas de forma democrática y pacífica".
Confía también en el final del chantaje a los empresarios por medio del "llamado impuesto revolucionario" que, aún "no ha desaparecido", y que "no es más que una manifestación del fenómeno violento" de ETA, cuya existencia es "incomprensible en un país desarrollado como el que tenemos y en un entorno europeo".
Respecto a la economía española, Zubiaurre cree que se advierten "una serie de limitaciones y dificultades de tipo estructural" que se deben resolver para que "España empiece a estar en condiciones equiparables a otros países, pueda tener crecimiento y crear empleo", ya que uno de sus "mayores problemas específicos" es su "altísima tasa de desempleo, la número uno en la UE".
"La reforma del mercado de trabajo es una condición necesaria, igual no suficiente, para que se dé ese crecimiento de empleo" en tasas importantes, que, a su juicio, requiere asimismo otras "reformas estructurales pendientes", que tendrán resultados a medio y corto plazo, pero que cuanto más se pospongan "más tardía será también la recuperación".
El sistema financiero, la "delicadísima situación" de muchas cajas de ahorro, el mercado de trabajo, el sistema de pensiones, la carestía energética, la apuesta por el I+D, el fracaso escolar, el ámbito educativo y la "baja cualificación de muchas universidades españolas a nivel internacional" son algunos de los "problemas" que, a juicio de Zubiaurre, "lastran la competitividad y la capacidad de desarrollo".
En cuanto a la reforma laboral aprobada en septiembre, el presidente de Adegi reitera que va "en la buena dirección", con "ciertas mejoras evidentes" en materia de legislación, aunque resulta "insuficiente" ya que, por ejemplo, "falta el capítulo de la flexibilidad interna de las empresas, que está muy limitado".
Respecto a los rescates financieros de Irlanda o Grecia, Zubiaurre confía en las palabras de "los responsables gubernamentales" españoles, que descartan aquí una situación similar, y en que se cumplan "las exigencias" de Bruselas para que España gane competitividad y resuelva el "grave problema del déficit", que tiene una evolución positiva, que espera que "se mantenga".
Preguntado por decisión de la Comisión Europea de pedir una multa millonaria a España por las denominadas "vacaciones fiscales" vascas, el presidente de la patronal ha expresado su "disconformidad" con la propuesta de sanción y ha opinado que es el momento de establecer "mecanismos de diálogo, negociación y, en su caso, acuerdo para llegar a una solución lo más satisfactoria posible".
Ha recalcado, sobre todo, la "inocencia total" de estas empresas que en la década de los 90 se acogieron a unas ayudas fiscales completamente "legales" y que, 17 años más tarde, se encuentran con esta "incertidumbre" económica.