La otra cara del SMI: Los trucos para no pagarlo que hasta la CEOE pide denunciar

  • aramendi, por su parte, ha instado a denunciar los casos de fraude

“Estamos cobrando brutos mensuales 795 euros”; “Complementos que eran extra salariales y otros personales han servido de absorción y compensación para que sumen 900 euros”, estas son algunas de las 'trampas' que realizan algunos establecimientos para no cobrar el Salario Mínimo. El sector hostelero es uno de los más rezagados a la hora de cumplir con la ley.

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha instado este jueves a los sindicatos a denunciar las posibles irregularidades en la aplicación de la subida del Salario Mínimo, al tiempo que ha denunciado el "perjuicio muy grande" que están teniendo las empresas en las contratas públicas al no tenerse en cuenta por parte de las instituciones públicas el incremento, por lo que pide que se indexe a los contratos ya vigentes. Algo con lo que no está de acuerdo un Gobierno que con los últimos datos del paro exigió al Banco de España que pidiera perdón por alarmar de forma gratuita a los españoles. Desde la entidad nadie ha contestado. Siempre han mantenido que es pronto para sacar conclusiones.

Por su parte, CCOO ha presentado esta misma semana el informe La subida del salario mínimo en 2019 que analiza la incidencia de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), en el que señala que ha beneficiado a 1.200.000 personas asalariadas, coincidiendo con el lanzamiento de la web de la campaña de información y sensibilización https:www.quenotelajueguen.es con la que el sindicato pretende atajar los incumplimientos de la subida y corregir las incorrectas aplicaciones por parte de los empresarios, una situación que afecta a cientos de miles potenciales beneficiarios del incremento del SMI, según ha denunciado el secretario general de CCOO.

Garamendi, por su parte, ha instado a denunciar los casos en los que se detecte que no se está aplicando la subida del SMI a 900 euros, si bien ha dicho entender que "la mayoría de gente lo aplica", y ha incidido a que en general le ha tocado llevar a cabo la subida a "gente que piensa que no es empresaria y lo es", como el caso de las empleadas del hogar. "Se habla de los empresarios pero a las empresas que yo represento en una gran medida están por encima de ese salario", ha enfatizado.

De igual forma, ha denunciado el perjuicio "muy grande" que están teniendo las empresas en las contratas públicas, tras la aplicación de la subida del SMI, ya que las instituciones públicas no están teniendo en cuenta el impacto de la medida en los márgenes de los contratos ya licitados y en vigor.

En este sentido, ha recordado que en el acuerdo nacional de convenios con los sindicatos se acordó que cuando se subiera el SMI las instituciones en sus contratos públicos también tendrían que indexar dicho salario. Se ha referido específicamente a casos como el de las contratas de limpieza de los ayuntamientos, en donde cree que se está haciendo un "perjuicio muy grande" a las empresas.

"Entiendo que si hay que subirlo, las primeras que tienen que ser conscientes sobre esto tienen que ser las propias instituciones del Estado", ha reprochado Garamendi, quien ha abogado por que se indexe la subida a los contratos públicos ya vigentes para que puedan mantener los márgenes fijados cuando se suscribieron, previo a la subida del SMI.

Respecto al impacto del SMI en la creación de empleo, ha recordado que al mes siguiente de elevarse el SMI se incrementó el paro y sin embargo él dijo que en un mes específico no se podía evaluar la repercusión de la medida, por lo que ahora en dos meses tampoco y "menos en un mes mayo que se sabe que es un mes bueno". Además, ha vuelto a incidir en la dificultad de evaluar el impacto, ya que "nunca se va a poder estudiar cuántos empleos se hubieran creado" sin la medida.

Preguntado sobre la salida de España del procedimiento de déficit excesivo, propuesta por la Comisión Europea, ha insistido en la necesidad de reducir la deuda pública para que España gane competitividad. "No me interesa tanto lo que me diga Bruselas, a mí lo que me preocupa es que mi país sea competitivo", ha apuntado el presidente de la patronal, quien ha recordado que la deuda pública es "muy alta", al superar el 97% del PIB, y que "hay que devolverla". Por ello, ha mostrado su "preocupación" por el déficit público y ha instado a implementar medidas para rebajar el desajuste. Por último y sobre la política fiscal que necesita España, el presidente de la patronal empresarial también ha pedido al nuevo Gobierno que se conforme "más bases imponibles y menos tipos".