Los que más han notado este calor abrasador han sido los del centro y oeste peninsular. Allí, la anomalía térmica ha sido de 2 grados centígrados por encima de la media. Muy diferente ha sido en el litoral mediterráneo, en donde las temperaturas han sido bastante normales con respecto a otros años. Incluso se podría hablar de 'frío' en algunos puntos de las Islas Baleares, Murcia y Alicante.
Esta variación térmica ha sido más destacable en las temperaturas máximas que en las mínimas: hablamos de 1,8 grados centígrados por encima, en las horas más calurosas del día, y de 0,8 grados por encima, durante la noche.
Récord de máximas
Vigo aeropuerto se lleva la medalla al 'nuevo máximo absoluto'. La AEMET confirma que los 40,8 grados del día 7 de agosto fueron los más altos para la serie de esta estación. Esta temperatura fue 3 grados centígrados superior al anterior registro, que se observó en agosto de 2013. Los valores máximos también se superaron en los termómetros de Badajoz aeropuerto y Granada aeropuerto, con 28,3ºC y 27,2ºC, respectivamente.
Las mínimas más bajas se dieron en Molina de Aragón. La 'friolera' de 5,1ºC se registró en la noche del día 11 de agosto.
Chubascos puntuales y débiles
El ambiente ha sido muy seco en el último mes: ha llovido una media de 8 litros por metro cuadrado, cuando lo normal es esperar 23 litros por metro cuadrado. Es decir, las precipitaciones han descendido en un 35 por ciento.
Ha caído menos, y no tan a menudo. Las lluvias han estado asociadas a tormentas y la cantidad de agua no ha alcanzado ni el 25 por ciento en el Valle del Ebro Navarra, este de Castilla y León, extremo sureste de Galicia, en algunas zonas de Cantabria y oeste del País Vasco, cuadrante suroeste y centro peninsulares, diversas zonas de la costa mediterránea, este de Baleares y en Canarias.
Las más intensas, en cualquier caso, se han registrado en Levante, Cataluña y zonas de Cantabria entre los días 9 y 10 de agosto.