El viento del sur tiene su lado bueno y su lado malo: por una parte, le suma unos grados a los termómetros, dejándonos unas temperaturas muy veraniegas el miércoles; por otra parte, sopla con fuerza y pone bajo aviso por riesgo a más de 10 provincias.
El frente asociado a la borrasca atlántica entrará por el oeste de la península, irrumpiendo con rachas de 80 km/h desde primera hora de la mañana en el norte de Cáceres, con aviso amarillo. Misma situación vivirán en Ourense, León, Asturias, Palencia, Cantabria, Salamanca y, en el Cantábrico más oriental, en Navarra, Guipúzcoa y Álava, donde amanecerán con rachas muy virulentas.
Poco a poco más zonas se verán afectadas por ese viento del sur, llegando también durante la primera mitad del miércoles a las provincias de Ávila y Segovia. En Cádiz el viento de levante se fortalecerá y se espera que sople en el Estrecho con rachas de hasta 70 km/h. El levante será precisamente el que más guerra dé en los próximos días en las provincias del Mediterráneo.
*Imagen: Racha máxima de viento prevista para el miércoles, 17 de abril / @crballesteros
Si en tus planes hay una escapada para el resto de la semana, seguramente estés al tanto de que el tiempo no va a ser el más óptimo. Las lluvias serán una constante en casi todo el país y hará más frío, todo ello por la borrasca que entra y el episodio de gota fría que se prevé desde mitad de la semana. Pero no solo por el Atlántico llega la inestabilidad, también el Mediterráneo nos va a dejar mucho viento que será más intenso el sábado en todo el este peninsular y arrastrará humedad a algunas regiones.
Aún no se han activado avisos meteorológicos porque es pronto para confirmarlo con plena certeza, pero los modelos apuntan nuevamente a rachas virulentas en todo el interior, Baleares y, especialmente, en la Comunidad Valenciana y este de Castilla-La Mancha.
*Imagen: Racha máxima de viento prevista para el miércoles, 17 de abril / @crballesteros