Hacía tiempo que no llovía en Canarias, pero ahora que ha llegado a inestabilidad los acumulados sorprenden. Con 20 litros por metro cuadrado cada día, las islas están viendo cómo sus campos se riegan casi incesablemente. La razón está en una potente borrasca que se ha formado en el Atlántico, y que además de lluvia y cielos grises, ha teñido de blanco las regiones más montañosas como el Teide.
En las próximas horas se va a ver desplazada hacia el noreste peninsular lo que va a formar, sin llegar a la península, que se forme un pasillo de vientos en el Estrecho, afectando a toda la costa oriental andaluza, Murcia, Ceuta y Melilla. De todas, la región en la que se verán los efectos más adversos será Cádiz. Allí están activados los avisos naranjas por olas de hasta 5 metros y rachas que pueden alcanzar los 120 km/h.
Además, las predicciones marcan una formación de posibles nubes con chubascos durante la segunda mitad del martes en puntos de Ceuta Melilla y costa mediterránea andaluza, lo que puede dar lugar a algunas lluvias en dichas regiones.
*Imagen: rachas de viento previstas para el miércoles, 27 de marzo / @crballesteros
Paralelamente a esta borrasca, hay otro sistema frontal que se ha gestado en el Mediterráneo, y que ha impulsado el viento de levante. Este tiene la característica de que enfría las regiones costeras como Murcia, Valencia y Alicante, donde estos días no vamos a llegar a los 20ºC.
Pero una vez que se adentra en el interior, recalienta el aire en Andalucía occidental y Extremadura, lo que explicaría por qué estamos teniendo máximas de 27ºC en Badajoz o 29ºC en Sevilla.
Se espera que este temporal de viento se alargue, al menos, hasta el fin de semana, cuando la potencia de las rachas de viento se reduzca drásticamente. Hasta entonces, habrá que tener precaución, sobre todo en zonas de costa para no salir mal parado por el levante.