La presencia de una baja atlántica por el oeste no va a facilitar el fin de las lluvias en el norte peninsular, donde ya no saben dónde meter tanta agua. Con los embalses a más del 90% de su capacidad, la mayoría están deseando que llegue el sol al igual que al resto del país. Sin embargo, les tocará esperar, pues las previsiones marcan lluvias hasta, al menos, mediados de la semana que viene.
Se trata de una predicción basada en modelos numéricos cuya fiabilidad disminuye según miramos más a largo plazo, por lo que es importante ir consultando las predicciones día por día. De hecho, no se descarta que incluso se alarguen más allá de esa fecha, si bien la Agencia Estatal de Meteorología ha publicado en su informe meteorológico mensual que la tendencia es a la normalidad en el norte. Eso sí, sí que se esperan más precipitaciones de lo normal durante esa semana en el cuadrante nordeste peninsular.
*Imagen: predicción semanal del 9 al 15 de julio / Aemet
En definitiva, todo apunta a que hasta el miércoles 11 de julio, las lluvias están aseguradas en todo el Cantábrico (a pesar de que habrá, como es habitual en estas regiones, momentos en los que salga el sol). Las nubes de evolución diurna darán paso a precipitaciones durante la tarde, que además vendrán acompañadas en su mayoría de tormentas y aparato eléctrico.
De hecho, hasta este jueves se espera que sean de cierta intensidad en el Cantábrico, alto Ebro y puntos de Pirineos, donde además podrían estar acompañadas de granizo. También las veremos en Galicia y norte de Castilla y León, pero allí serán más débiles y dispersas. Para el fin de semana, las tormentas seguirán, pero la tendencia es a que disminuyan su potencia en general, y que sean más débiles que las producidas hasta ahora.
*Imagen: predicción prevista para este miércoles, 4 de julio / Aemet
A partir de la semana que viene, algunos modelos señalan que seguiremos teniendo lluvias débiles en el extremo norte peninsular, y que podrían dar un respiro a la región el martes. Sin embargo, el miércoles la llegada de otro embolsamiento de aire frío podría despertar de nuevo la inestabilidad. Habrá que estar pendientes de la información meteorológica para confirmarlo, pero en general, en el norte va a tocar sacar el paraguas sí o sí.