Lluvias de barro este fin de semana: el polvo del Sáhara se une a las tormentas

eltiempohoy.es 24/05/2018 17:16

De hecho, ya se han producido las primeras 'lluvias de sangre', tal y como también son conocidas estas precipitaciones tan particulares y exclusivas de nuestro país. Al estar tan cerca del continente africano, a veces se dan las circunstancias necesarias para que el polvo ascienda hacia latitudes altas como la nuestra. Cuando no hay precipitaciones, se aprecia un enturbiamiento del cielo pero si hay precipitaciones, se convierte todo el suelo en un barrizal.

De momento, ya se han visto en la provincia de Alicante de sur a norte, y el extremo sur de Valencia. También en Torrevieja, donde se han llegado a acumular hasta 2 litros por metro cuadrado entre las seis y las siete de la mañana. Pero no se puede descargar que las veamos en general en todo el país, precisamente porque las previsiones de lluvia son generalizadas.

Las más importantes las veremos este viernes en zonas del tercio norte peninsular y ambas mesetas, e incluso muy fuertes en Madrid y otros puntos de la zona centro de la Península, pero lloverá en todo el país excepto en el litoral mediterráneo.

A partir del fin de semana, lo más probable es que el episodio de calima comience a remitir, por lo que las lluvias de barrio cesarían en general.

¿Qué son las lluvias de sangre?

Como hemos dicho antes, se trata de arena del desierto del Sáhara. Dada la proximidad geográfica, la Península Ibérica y la cuenca mediterránea están más expuestas a las invasiones de arena del desierto o polvo en suspensión. Por tanto, no es de extrañar que sea un fenómeno meteorológico común en nuestra latitud que tan solo compite con las nubes de arena que se generan también en las tormentas del desierto de Gobi en Asia.

Pero, el polvo del desierto no se manifiesta solamente en episodios de lluvias. En periodos de estabilidad hace acto de presencia la calima que es el nombre con el que se conoce al polvo en suspensión procedente del Sáhara y que, erróneamente, confundimos con la contaminación ya que la tonalidad del cielo se asemeja al gris de la polución.