La tristeza es grande: el ‘veranillo de San Martín’, el último resquicio de calor antes de que acabemos del año, ya ha pasado. En su lugar hemos dado paso a un nuevo episodio de lluvias que vendrán motivadas por la entrada sucesiva y constante de borrascas durante toda la semana. Además, el aire frío a 1.500 metros hará que en las montañas volvamos a tener nieve.
Los acumulados más importantes se producirán, como es habitual, en las montañas del norte peninsular, aunque también veremos el manto blanco en puntos del Sistema Central, la submeseta norte y la Serranía de Cuenca.
*Imagen: acumulación de nieve prevista desde el lunes hasta el miércoles / Tropical Tidbits
En definitiva, los grandes protagonistas de las nieves serán de nuevo las montañas de la Cordillera Cantábrica y Pirineos, donde la cota descenderá a partir del martes a los 1200 metros de altura. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en prácticamente todas las montañas las cotas la nieve se ubicará entre los 1400 y 1600 metros.
Los modelos meteorológicos prevén que estas nevadas se sucedan toda la semana, aunque no con la virulencia con la que vivimos el pasado episodio invernal En este caso, la entrada de aire frío no será tan fuerte como la del aire siberiano, ni las borrascas que van a cruzar nuestro país serán tan fuertes como para que se produzcan precipitaciones intensas.