La irrupción de aire cada vez más frío del Atlántico provoca este cambio en las temperaturas que se contagia poco a poco a toda la península. Además las lluvias darán algo de tregua durante el sábado y esa falta de agua impedirá que se suavicen las temperaturas.
La noche más fría, la del sábado
Donde más se sentirá esa tendencia el sábado será en los Pirineos, donde la temperatura será ya invernal y desciende la cota de nieve. También amaneció blanco por las nevadas el Teide este viernes.
Es posible que al coger el coche el sábado te toque rascar porque las heladas llegarán a todas las regiones del país por esa falta de precipitaciones que han suavizado hasta ahora el frío.
La borrasca que entraba esta semana por el extremo norte deja avisos por rachas de viento de hasta 90 km/h en Cantabria, Asturias, A Coruña y Pontevedra. En el caso de estas dos últimas provincias hay además aviso por riesgo costero, especialmente en las Rias Baixas y el oeste de A Coruña.
Nevadas y frío: la tónica del domingo
Las máximas del domingo se situarán por debajo de los 10 grados en la meseta norte, donde ese aire de Poniente del que hablamos dejará una sensación térmica que no es novedad en esta zona. Eso sí, la vuelta de las lluvias relajará un poco los termómetros, suavizando las temperaturas sobre todo en el Mediterráneo y zonas de Andalucía.
Y no acaba aquí la cosa: noviembre se despedirá con valores que se seguirán desplomando al menos hasta el lunes y que dejarán el domingo en el norte de Huesca el primer aviso del otoño por nevadas.