La razón de que hayamos vuelto a esta situación de estabilidad es un nuevo frente anticiclónico, que bloquea la entrada de aire frío y evita que haya movimiento en nuestra atmósfera. Por eso, no solo tenemos cielos azules sin nubes y calor. Las partículas contaminantes, cada vez más condensadas en el ambiente, son otro de los males de este episodio.
Sin embargo, si hay algo que tiene el 'veroño' que jamás ocurriría en el verano 'de verdad', es la amplitud térmica. Junto a esos valores extremos de más de 30ºC vendrán mínimas realmente frías, de entre 8ºC y 10ºC. En total, hasta 20ºC grados de temperatura separarán el día y la noche, como es el caso de Ciudad Real (28ºC – 8ºC) y Badajoz (31ºC-11ºC), donde la amplitud será de las mayores de España.
En otros puntos también habrá tiempo de chaqueta y 'shorts', como Madrid (27ºC-9ºC), Cuenca (26ºC-8ºC), Jaén (27ºC-12ºC), Cáceres (28ºC-13ºC), Sevilla (31ºC-15ºC), Albacete (26ºC-8ºC), etc.
Los únicos que se salvan
En el norte, la situación será algo distinta. Para empezar, los valores no serán tan extremos. Si bien es cierto que se alcanzarán valores templados (máximas de 21ºC en todo el litoral cantábrico), las mínimas rondarán los 10ºC.
Una amplitud térmica nada comparable con la del resto del país. En este sentido, el archipiélago canario gozará de una situación similar, con máximas de 25ºC y mínimas de 22ºC.