Fueron apenas 30 segundos pero arrasó con todo. El fuerte tornado que asustó a los vecinos de Mont Roig arrancó pinos de cuajo, rompió persianas y provocó cortes en la carretera. “Aquí era peligroso porque volaba todo. Tejas, canaletas... Había un contenedor dentro de una piscina y árboles caídos”, explicaba una de las propietarias. El primer temporal del otoño está causando graves daños en nuestra Península.

