El Gobierno y Generalitat buscan un acuerdo de financiación singular con muchas discrepancias entre ajenos y propios

El Gobierno y la Generalitat debatirán la financiación singular en Cataluña con actores discrepantes, en la oposición, pero también entre los aliados. Esquerra Republicana (ERC) ya ha advertido de que de ello dependerá la continuidad de su apoyo al Ejecutivo de Pedro Sánchez, que esta semana se enfrenta a temas que incluyen la propuesta española en Bruselas para que el catalán sea lengua oficial de la UE.

El presidente del Gobierno, esta semana también recibirá en Moncloa al Lehendakari para abordar el traspaso de la gestión de las pensiones no contributivas, mientras que el viernes, el Gobierno volverá a insistir para que Bruselas acepte el catalán como lengua oficial en la Unión Europea, una de las condiciones del apoyo de los de Puigdemont.

La Comisión Bilateral, que llega con semanas de retraso, abre a que los dos gobiernos lleguen a un acuerdo para avanzar en la gestión tributaria del IRPF, de modo que la Generalitat pueda lograr avances sustanciales en esta materia de cara a 2026. El pacto entre el PSC y ERC para la investidura de Salvador Illa, que fue avalado por el PSOE, a partir de 2026 comprende que sea la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC) quien recaude el IRPF.

La Generalitat gestionará, recaudará y liquidará todos los impuestos soportados en Cataluña, y prevé que la administración catalana aumente sustancialmente su capacidad normativa. Un acuerdo delicado que llevará días de negociación por lo que se prevé que este lunes sea solo el comienzo.

Para el Partido Popular este pacto significa una ruptura con la igualdad entre españoles. Pero el rechazo a la financiación singular no es solo cosa de la oposición, sino también dentro de las filas socialistas como el más crítico de los barones socialistas, el presidente de Castilla–La Mancha, Emiliano García Page y el otro presidente socialista, Adrián Barbón, jefe de gobierno del Principado de Asturias. 

Las presiones de ERC al Gobierno

"A estas horas es muy difícil saber cómo terminará esta negociación", ha advertido Junqueras en una comparecencia este sábado, en la que el independentista trasladó la presión a los socialistas para concretar el acuerdo sobre el modelo de financiación y la recaudación de impuestos por parte de la ATC.

El líder de Esquerra anunció que en los próximos días ERC presentará en el Congreso su propuesta de reforma legislativa -que modifica la LOFCA y dos normas más- para que Cataluña pueda cobrar y gestionar todos los impuestos y emplazó al PSOE a que la apoyara.

"Seguro que el Partido Socialista es consciente de las consecuencias de las decisiones que toma", ha asegurado Junqueras, que pidió "coraje" y señaló que si los socialistas no cumplen con la financiación singular ERC no respaldará los presupuestos ni otras medidas tanto del Gobierno como de la Generalitat. "Cuanto mayor sean las concreciones a las que llegue en esta Bilateral, más fácil será el compromiso de posibles nuevos acuerdos con ERC"

El Gobierno defiende que la financiación singular no generará un agravio territorial

Contra esta tesis, el Gobierno defiende que la financiación singular de Cataluña prevé una cuota de solidaridad con las comunidades autónomas menos ricas y que se respete el principio de ordinalidad, es decir, que Catalunya mantenga la misma posición en la clasificación de lo que aporta y lo que recibe.

La vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendió este viernes que lo que se pacte no generará un agravio territorial con otras partes y que estará "en manos de todas las comunidades autónomas que quieran desarrollar su estatuto de autonomía".

Desde ERC, defienden que un modelo de financiación que sea extrapolable a otras comunidades autónomas "no quiere decir que no sea singular" para Catalunya y que lo que han estado negociando se parece bastante, desde el punto de vista técnico, a un concierto económico, en palabras de su vicesecretario de Comunicación de ERC, Isaac Albert.