En rueda de prensa posterior a la reunión de la Junta de Portavoces de la Cámara Baja, Alonso ha insistido en que la situación de España es totalmente distinta a la de Irlanda, que ha tenido que pedir el rescate de la UE.
No obstante, ha criticado que desde el PP "no se dejen de emitir mensajes de desconfianza" que no sólo son "injustos" sino que también son "falsos" y "políticamente impresentables" al poner en tela de juicio una solvencia que España tiene acreditada.
Alonso ha garantizado que España cuenta con fundamentos económicos sólidos, uno de los mejores sistemas financieros del mundo y una tasa de endeudamiento público que está veinte puntos por debajo de la media europea.
Eso se traduce en que es un país serio y solvente, que cumple siempre con sus compromisos, como lo demuestra, según su criterio, la tarea de reducir el déficit emprendida por el Gobierno y la devolución de todos los préstamos.
"Seguiremos haciendo lo que haga falta en el futuro para seguir siendo lo que somos y seguir afianzando nuestra situación de solvencia", ha zanjado Alonso.
Ha abundado en esta idea al considerar que España no debe sufrir las consecuencias de lo que ocurre en una parte de la zona euro ni ser víctima de "ningún ataque" por parte de los mercados internacionales.
En este contexto, ha anotado la necesidad de reflexionar más a fondo sobre la conveniencia de que la UE construya no sólo una política monetaria común, sino también una política fiscal, a fin de evitar las turbulencias de los últimos tiempos.
Sobre la reforma de las pensiones, ha reiterado que debe hacerse en el marco del Pacto de Toledo, ante el que comparecerá el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, el próximo 1 de diciembre.
Durante la misma comparecencia informativa se ha referido brevemente a las elecciones en Cataluña del próximo domingo y ha sido para dejar claro que los resultados de esos comicios deben leerse en clave catalana, porque su reflejo en el ámbito nacional es "incierto a día de hoy".