"Hablar con los terroristas supone darles lo que no pueden alcanzar con los tiros"

ÁLVARO GONZÁLEZ 18/02/2008 00:00

Durante el encuentro, Rajoy ha señalado que, por el momento, según sus sondeos, existe un empate técnico entre PP y PSOE. Sin embargo, ha anunciado que, de mantenerse la igualdad en el resultado de las elecciones, no propondrá un gran pacto 'a la alemana' a los socialistas. Aunque sí intentaría pactar con ellos las cuestiones claves del Estado: seguridad, terrorismo, bienestar, pensiones y política exterior. Luego, ha explicado, trataría de entenderse con los que comparten el modelo de sociedad que él defiende.

De hecho, se encuentra muy decepcionado con Zapatero. El presidente del Gobierno le acusó de no celebrar las detenciones de los etarras que atentaron en la Terminal 4. Rajoy fue ministro del Interior, vivió muchos funerales, "demasiados", ha puntualizado, y considera "una mezquindad" las palabras del líder socialista. "En política no vale todo", se ha quejado.

Problema kosovar

El candidato popular no está en absoluto conforme con cómo está reaccionando parte de la comunidad internacional en el tema de Kosovo. No se puede tomar una decisión de esas características sin un acuerdo. "No puede haber una declaración de independencia unilateral". Incluso, ha recomendado al Gobierno que no envíe funcionarios civiles al nuevo estado.

En cualquier caso, Rajoy no ve paralelismos con España. Yugoslavia se formó de forma especial en el siglo XX. España, por su parte, "es la nación más vieja de Europa y tiene más de quinientos años de antigüedad".

Acabar con ETA sin negociar

También ha insistido, en respuesta a una de las preguntas planteadas por lo ciudadanos entrevistados por Telecinco, en que "de ninguna de las maneras negociará con ETA". Hablar con los terroristas supone darles "lo que no pueden alcanzar con los tiros". Según su criterio, sobre esta cuestión, el Gobierno "mintió y después fracasó".

Si él gobernara, lo que haría sería acabar con ETA con todo el peso de la ley. Modificándola, siempre dentro de sus límites. Porque en la política no pueden interferir los terroristas, "la política la deciden los ciudadanos", ha sentenciado.

Adaptación de los inmigrantes a las costumbres

Sobre la inmigración, Rajoy ha puesto por delante que él es gallego y que ha visto a sus familiares emigrar. No es un tema que le sea ajeno. Sin embargo, cree que los inmigrantes tienen que adaptarse a las costumbres españolas. No pueden darse casos de mutilación genital o poligamia. Aunque el candidato del PP "no quiere quitarle a nadie el velo".

En cambio, sobre la delincuencia ha sido mucho más tajante. Con toda la gente que ha llegado a España a trabajar, hay muchos que lo han hecho para delinquir. Se trata, a entender de Rajoy, de un hecho que nadie puede poner en tela de juicio. Por eso, a todos los extranjeros que cometan delitos en España les echaría.

Independencia de la Iglesia

El Partido Popular tiene una postura de independencia y respeto con la Iglesia. Así como con el resto de confesiones. Para Rajoy no se debe censurar que los obispos orienten en el voto a sus fieles. Además, no lo han pedido expresamente para el PP, se ha quejado. Y, mientras tanto, la Junta Islámica sí ha pedido el voto para los socialistas. "Esto nadie lo dice", se ha molestado Rajoy.

La mano de Aznar

Otra cuestión que ha importunado a Mariano Rajoy son las dudas sobre la injerencia de José María Aznar en su liderato en el PP. Aznar ha dejado la política, ha rematado. Y decisiones como las de incluir a Pizarro en las listas son exclusivamente suyas. No en vano, ha confesado que es amigo de Pizarro desde hace veinte años. Y se reunía con él para almorzar todos los días y departir sobre "lo humano y lo divino".