Soraya Sáenz Santamaría cuenta sus inicios en la política hace ocho años cuando llegó a la Moncloa y un día después de la entrevista la llamaron para ser la asesora más joven del entonces vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Sobre el líder del PP confiesa su impresión inicial, que fue como un amor a primera vista: "Me engatusó, Rajoy". "Cuando le conocí, me rompió los esquemas de lo que yo pensaba que era un político".
La entrevista recoge además la faceta más personal de la portavoz popular, la que confiesa su ritmo de trabajo, "como las hormiguitas", dejando las genialidades para otros".
En ese sentido, reconoce no tener ambición de poder y reconoce que mirar "desde la última fila" le han enseñado a saber que "el político es un instrumento absolutamente prescindible".
De ahí que Saénz Santamaría asegure no ver "ningún erotismo en el poder", y por el contrario, el sentido del humor "es lo único que tiene tirón". "Más sugerente de los que van al tran-tran".
La política, de 37 años, ha criticado el machismo que hay en política, un mundo muy masculino". "A las mujeres en edad fértil se nos mira como sospechosas. Piensan que cuando te embarazas vas a dejar de rendir. Ellos, en cambio, pueden tener hijos y las mismas responsabilidades".
Su gran apoyo han sido las mujeres, después de su nombramiento hubo una "movida tremenda", pero cuando salía a la calle la animaban y le decían "nosotras estamos contigo".
La foto que acompaña la entrevista, es la foto de la discordia. La imagen que provocó un revuelo hasta en las propias filas del Partido Popular. En ella se ve a Sáenz de Santamaría, en todo su esplendor, con un vestido de noche, escotada y descalza, aunque aclara que es "muy tímida".ZA