Me siento triste y no entiendo por qué: ¿cómo saber si es por culpa de la menopausia?
Durante la menopausia es muy común tener sentimientos de tristeza provocados por los cambios hormonales
La cantante Nina aborda cómo gestionar emocionalmente la llegada de esta nueva etapa vital en una nueva entrega de 'Hablemos de la menopausia'
Ejercicios de fuerza en la menopausia: ¿de verdad importan o son una moda?
Tener sentimientos de tristeza durante la menopausia es muy común. Los cambios hormonales que acompañan a esta fase vital pueden provocar cambios en el estado de ánimo, y hacer que tengamos ganas de llorar a todas horas. Cerca del 20% de las mujeres durante la menopausia atraviesan una depresión. Pero, ¿cómo saber si esa tristeza está relacionada directamente con ella o con otros factores de nuestra vida? La cantante y actriz Nina nos explica cómo dar una respuesta emocional a esta etapa de la vida en una nueva entrega de ‘Hablemos de la menopausia, por Nina’.
El descenso de los niveles de estrógeno y progesterona que se da en la menopausia puede afectar a la cantidad de serotonina que produce el cuerpo. Esta 'hormona de la felicidad' ayuda a controlar la memoria, el estado de ánimo, el sueño o el deseo sexual, y tenerla en un nivel bajo puede generar depresión y ansiedad.
Si nos sentimos tristes y no hay una causa externa clara, como puede ser una pérdida, estrés laboral o un conflicto personal, las hormonas podrían estar detrás. También algunos síntomas prototípicos de la menopausia como el aumento de peso, la sequedad vaginal o el envejecimiento de la piel pueden afectar a la autoestima y contribuir a ese estado pesimista.
Poner esta etapa en el lugar que le corresponde
"A nivel de gestión mental y emocional, como logopeda y persona popular, sé que no hay que darle la espalda a toda la casuística que se da en esta nueva etapa que nos visita", nos explica Nina. "Cuando el cerebro recibe un impacto emocional, lo primero que hay que hacer es coger el toro por los cuernos y poner ese impacto en el lugar que le corresponde. No darle ni más ni menos importancia", añade.
En ese sentido, hay muchos factores que juegan un papel. Por ejemplo, el entorno, lo que nos hayan inculcado tus padres o nuestra propia capacidad de resiliencia. Si la tristeza es persistente e incluye pensamientos negativos muy frecuentes, conviene hablar con un profesional de la salud.
"Yo tengo un oficio inestable por naturaleza. He estado siempre en la cuerda floja, así que hay pocas cosas que me den miedo o me desestabilicen. Quien no tenga estas herramientas, lo mejor que puede hacer es ponerse en manos de un especialista, de un psicólogo, de un psiquiatra", recomienda Nina.
Ejercicios de fuerza: ¿efectivos o una moda?
Una de las actividades físicas más recomendadas en los últimos tiempos son los ejercicios de fuerza, con el objetivo de combatir el debilitamiento de las fibras musculares que llega con la menopausia. Pero ¿se trata de una moda o es una práctica efectiva? Para Nina, efectivamente ayuda. Todo lo que se pueda hacer a nivel de fuerza, combinado con flexibilidad, va a ser beneficioso. Lo importante es trabajar de forma dirigida, asistida por alguien que sepa interpretar nuestro cuerpo y nuestras necesidades. La clave está en elegir un tipo de ejercicio que nos atraiga, que nos eduzca y que nos dé la posibilidad de disfrutar.
