Álava autoriza la caza del conejo de monte, que pone en peligro los viñedos de Rioja Alavesa

La Diputación de Álava quiere poner "coto" al exceso de población de conejos en el territorio, un animal cuya proliferación está produciendo daños "de forma reiterada en determinada zonas agrarias y que, principalmente, afecta a los viñedos de la Cuadrilla de Laguardia–Rioja Alavesa", afirman desde la institución foral.

Por este motivo, el departamento de Agricultura ha emitido una orden en la que declara "la emergencia cinegética temporal" en la zona y autoriza la caza de esta especie.

El objetivo es conseguir "un control más ágil y eficaz" de la especie para reducir el tamaño de estas poblaciones "a niveles de equilibrio" y atajar las graves consecuencias que ocasionan en los viñedos de la comarca.

No es la primera vez que el conejo amenaza el campo alavés. El pasado año, la Diputación encargó el estudio “Estimación de la abundancia de conejo (Oryctolagus cuniculus) en Rioja Alavesa y propuesta de medidas de gestión”. Se propusieron varias actuaciones que "en ciertas áreas, no son suficientes para evitar los efectos negativos sobre los cultivos", por lo que la institución se ha visto "obligada" a recurrir a permitir la caza.

La orden estará vigente hasta el 31 de mayo, si bien no se consigue antes erradicar "el problema"

"No dejan crecer la planta"

La autorización en estas fechas viene motivada porque el conejo está causando graves problemas en los viñedos justo en el momento crucial para la producción viticultora

Es ahora cuando se produce el crecimiento de la vid, cuando "los brotes están tiernos", nos cuentan desde la Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa (ABRA).

Muchos bodegueros están "sufriendo las consecuencias". " No dejan crecer la planta y , por tanto, no nace el fruto. Cada vez detectamos más conejos y nos afecta a todos. esto se convirtiendo en un verdadero problema para el sector, sobre todo en los viñedos del sur", reconocen.

Y es que la hembra de este tipo de conejo puede tener hasta 7 camadas al año, con una media de 6 crías. Además, es una especie de gran tamaño y muy voraz. La sequía y el calor ha provocado que se queden sin alimento en los campos y se adentren en zonas de cultivo en su busca, lo que, en el caso del territorio alavés, está poniendo en peligro la cosecha del vino Rioja del 2023.

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