El marido de la mujer herida en la cabeza en una carga de la Ertzaintza declara en el Parlamento Vasco: "Nuestra vida dio un giro traumático"

Dispositivo de la unidad antidisturbios de la Ertzaintza en Vitoria
Amaia Zabarte resultó herida el 5 de marzo de 2024 y tuvo que ser ingresada en la UCI "entre la vida y la muerte".TurismoVasco.com
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Vitoria-GasteizLa vecina de Irun, Amaia Zabarte resultó herida de gravedad, hace año y medio, tras recibir el impacto de una pelota de foam lanzada por la Ertzaintza, en la sien izquierda de la cabeza. La mujer tuvo que ser ingresada en la UCI del Hospital Donostia con una hemorragia cerebral y dos fracturas de cráneo, "debatiéndose entre la vida y la muerte". Aquel 5 de marzo de 2024, "nuestra vida dio un giro traumático" y, desde entonces, "vivimos un viacrucis", ha relatado su marido, Joseba Novoa, en el Parlamento Vasco, donde ha comparecido a petición propia.

Las pelotas de foam se emplean en Euskadi, en sustitución de las pelotas de goma, que dejaron de usarse como material antidisturbios tras el fallecimiento del joven Iñigo Cabacas en Bilbao por el impacto de uno de estos proyectiles.

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 "Lo que le sucedió a Amaia le podía haber sucedido a cualquiera, a cualquiera de sus mujeres, hijas o nietos", "simplemente, estaba allí", ha señalado Joseba, que ha recordado que aquel día se disponían a disfrutar en familia del partido de fútbol. Ha denunciado, apoyándose en vídeos, que aquella carga policial no estaba justificada y que "se puso en grave riesgo la vida de personas inocentes".

"Viacrucis", desde hace año y medio

Los hechos ocurrieron en marzo de 2024, en el transcurso de una carga policial, durante unos incidentes registrados antes del partido de fútbol que enfrentaba a la Real Sociedad con el París Saint-Germain. Un año y medio después, su marido, Joseba Novoa, ha comparecido en el Parlamento Vasco para relatar lo que ocurrió. Lo ha hecho acompañado del abogado de la familia, Iker Sarriegi,

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Un año después, la víctima presentó una denuncia en el juzgado de San Sebastián y cinco días después, "se decide el sobreseimiento del caso de lesiones leves por no conocer autor". Se recurrió el cierre a la Audiencia Provincial de Gipuzkoa, que lo revocó y ordenó al juzgado de instrucción practicar diligencias, en el marco de las cuales, se le tomó declaración a la víctima del pelotazo en abril de este año. Sin embargo, la familia de Amaia no entiende que no se haya celebrado un juicio que, a día de hoy, todavía no hayan declarado los agentes investigados y tampoco los testigos de la carga.

Por aquellas fechas, al menos tres personas resultaron heridas en Euskadi por el impacto de las pelotas de foam que emplea la Ertzaintza como material antibisturbios. Un menor de 16 años perdió un ojo en Tolosa, al recibir el impacto de uno de estos proyectiles; en Vitoria, una mujer de 60 años acabó con la mandíbula rota y en Donostia, esta mujer de 44 años de Irun acabó hospitalizada tras recibir un impacto en la parte posterior de la cabeza durante una carga policial, en el marco de los incidentes previos al partido de Champions que enfrentó a la Real Sociedad y al París Saint-Germain. Se abrieron investigaciones internas. En el caso de Amaia, su marido hoy no ha dudado en decir que "se sintió investigada, acusada y juzgada”.