Música

Las "cantareiras", protagonistas del Día das Letras Galegas: las guardianas del patrimonio oral

Leni  Álvarez con un grupo de cantareiras en una clase
Leni Pérez, con un grupo de pandereteiras en la asociación viguesa As Fontes VilarATLAS GALICIA
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Las cantareiras son las protagonistas de la celebración de este año del Día das Letras Galegas, dedicado en este 2025 a la poesía popular oral. El homenaje se ha personificado en las cantareiras de Mens (Malpica). A través de ellas, se quiere reconocer la importancia de la poesía oral, y la transmisión de coplas o canciones, fundamentales en la cultura gallega. En esa creación, protección y difusión del patrimonio cultural oral las mujeres gallegas han sido figuras claves.

A pesar de su importancia, las cantareiras siempre han sido figuras casi anónimas; las mujeres no eran conocidas más allá de los límites de sus pueblos (salvo, las Pandereteiras de Mens o Eva Castiñeira) y los grupos que se formaron no solían recibir nombres ni ajustarse a formatos fijos. Ellas no buscaron elogios más allá de su entorno. Y por ello, el trabajo de recuperación, difusión de editoriales y estudiosos ha sido crucial para conocer su legado.

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Pandereteiras de Mens

Esta importancia de las figuras femeninas la conoce bien Leni Pérez, pandereteira, compiladora de canciones y coplas, intérprete y profesora viguesa, que lleva años recorriendo distintas aldeas de Galicia, buscando canciones antiguas y coplas que las mujeres han conservado y transmitido de generación en generación.

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Leni destaca la importancia de todas las mujeres que mantuvieron esa cadena de transmisión oral: “Ellas eran las encargadas de organizar las fiestas en las aldeas e iban pasando de madres a hijas todas esas melodías”. “Todas esas maneras de divertirse y pasarlo bien se están recuperando ahora y llegando hasta los pubs”, apunta Leni. Hay miles de grupos de pandereteiras, y de canto, relata, y en las asociaciones culturales hacen un trabajo de recuperación fundamental de todas estás melodías “para ponerlas en valor y conservarlas”.

Las mujeres echaban mano de cualquier utensilio doméstico para acompañar las canciones populares

Las mujeres echaban mano de cualquier utensilio cotidiano que tenían cerca, para acompañar sus coplas: “Antes no había dinero y la pandereta y se compraba entre todas las mozas del pueblo. Por eso tocaban con botellas de anís, sartenes, incluso una lata de pimentón”, detalla, con un repertorio donde había muñeiras, jotas o pasodobles.

Marina Fernández con 75 años, es una de esas mujeres, que ahora se siente “como una niña de 15 años” cuando canta y toca la pandereta. Desde su clase, que comparte con un grupo de una veintena de personas de todas las edades, en la asociación de vecinos viguesa de As Fontes Vilar, cuenta cómo ella aprendió a tocar la peneira siendo una niña, (un colador de madera convertido en instrumento), una tradición que le vino de su madre y de sus tías. “La tradición no se debe perder porque es muy bonita”, cuenta emocionada.

Carmen Barcia recuerda que eran "las mozas más espabiladas las que hacían las fiestas y tocaban lo que tenían a mano sartenes, platos y de todo”. Ella celebra con sus 73 años que ahora está otra vez de moda “porque queremos recuperar las raíces que nunca se debieron perder”, detalla.

Porque como recuerda Leni, “nunca hubo tanto interés por aprender a bailar o a tocar la pandereta”. Clases como la suya están llenas cada semana, y siempre con jóvenes que buscan recuperar la tradición.  “Desde los años 80, hasta ahora somos miles de mujeres, hombres, y niños que quieren aprender a tocar, a bailar, a pasarlo bien en las foliadas”, apunta.   

En esa recuperación de la música tradicional y la fusión con los sonidos actuales han sido esenciales artistas como Baiuca, Tanxugueiras, Fillas de Cassandra o Mondra, entre otros. La aparición de nuevas figuras de la regueifa, algo así como el rap bravú (como Alba María, Xairo de Herbón), y los grupos que trascienden los ritmos tradicionales con la fusión con nuevas músicas, desde el rock y el jazz hasta el pop y la electrónica han aportado nuevas visiones en el panorama cultural. Todos ellos retoman ahora el vínculo que Fuxan os Ventos, Milladoiro, Leilía, Mercedes Peón, Uxía Senlle, o Xabier Díaz y otros muchos fueron tejiendo, desde el siglo pasado, logrando que la tradición se convierta ahora en vanguardia.