Helen Rhodes, una madre que viajaba al Reino Unido desde Hong Kong con su esposo y dos hijos pequeños, murió el 5 de agosto en pleno vuelo y sus familiares tuvieron que soportar la travesía junto al cuerpo de su ser querido durante ocho horas. La familia pretendía regresar a su país de origen, cuando la mujer se quedó dormida a la hora de trayecto y falleció de forma repentina. Cuando trataron de reanimarla ya no respondía y los intentos por salvar su vida no dieron resultado.
La víctima pudo sufrir un infarto, según los reportes. Su cuerpo permaneció en el asiento hasta aterrizar. Los familiares de Helen aprovecharon una escala en Frankfurt (Alemania) para informar a otros conocidos de lo ocurrido. Mientras los niños continuaron el viaje rumbo a Reino Unido, el padre permaneció en territorio germano junto al cadáver de su mujer.
Una amiga del entorno, Jayne Jeje, decidió abrir a la pocas horas del suceso una recaudación de fondos en GoFundMe para acarrear con los gastos de los trámites y el impacto anímico tanto en los pequeños como en el resto de pasajeros. Era amiga de la víctima y quiso explicar lo ocurrido.
"Todo esto se desarrolló frente a sus hijos", señala la mujer que ha abierto la campaña de recaudación de fondos. "Fue extremadamente traumático, todos sus seres queridos tuvieron tiempo de decirle lo que tenían que decirle. No hace falta mencionar que están devastados. Esta pérdida es inimaginable. Helen era una esposa y madre devota. Era el pegamento que mantenía unida a su familia", reza el texto.
La familia había terminado una larga experiencia en Hong Kong de más de 15 años para embarcarse en un nuevo capítulo con una nueva casa en el Reino Unido. "Todavía estamos incrédulos y conmocionados por el repentino fallecimiento. Ella estaba emocionada y nerviosa por la mudanza. Esperaba ver a sus familiares en casa, ya que no había visto a sus padres desde que comenzó la pandemia. Lamentablemente nunca podrá volver a verlos", precisa respecto a las intenciones del viaje de la familia. La Oficina de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth atienden el trágico caso.