Un hombre fallece al poco de salir de la cárcel dónde llevaba encerrado 30 años por un crimen que no cometió

Adrián Valero 02 NOV 2022 - 19:57h.

Claude Garrett ha pasado gran parte de su vida encerrado en prisión por un crimen que no cometió. Hace relativamente poco, y tras 30 años tras los barrotes, un juez decidió reabrir su caso debido a incongruencias con el proceso de la investigación. Pero tras únicamente seis meses en libertad, Claude de 66 años fallecía mientras dormía plácidamente.

Durante su tiempo en libertad no ha perdido el tiempo, como ha asegurado su amiga Liliana Segura: “desde entonces, y durante los últimos 5 meses, Claude disfrutó de su libertad. Disfrutó cada momento con su hija, Deana, y especialmente con su nieto, a quien adoraba absolutamente”.

Garrett fue condenado por provocar un incendio para acabar con su novia

Claude Garrett fue condenado en 1992 como el supuesto autor del asesinato de su por aquel entonces novia, Lorie Lance, quien falleció durante un incendio que se produjo en la casa en la que ambos residían en Old Hickory, Tennessee. El fatal accidente se produjo a altas horas de la noche, después de que la pareja regresara de una fiesta en un bar de su localidad llamado Daisey Mae's.

Durante el juicio, Claude afirmó ante el juez que en la noche del incendio cuándo despertó encontró un gran fuego en la sala de estar, tras la imposibilidad de apagarlo, llamó a las fuerzas de seguridad y acudió rápidamente a despertar a su pareja Lorie. Durante la huida de la vivienda en llamas, confirmó a la policía que Lance no le siguió hasta la salida por la puerta principal, en lugar de eso intentó huir sola por la puerta trasera de la casa.

Cuándo llegaron los bomberos encontraron a Claude intentado sofocar el incendio con una manguera, la cual no surtía mucho efecto. Así como intentó romper la puerta trasera, con un hacha, por la que supuestamente tenía que salir Lorie mientras repetía a los agentes del cuerpo de bomberos: "no entiendo por qué, no entiendo por qué no me siguió hasta la puerta”.

En un principio la investigación determinó que el fuego fue provocado

Después de que finalmente los bomberos consiguieran sofocar el incendio, encontraron en el interior de un cuarto de servicio a Lance, quien había fallecido debido a la inhalación de humos. Tras analizar la vivienda, los investigadores en un principio determinaron que el fuego había sido provocado, ya que se habían encontrados patrones de fuegos, los cuales eran producidos supuestamente por el vertido de aceite de calefacción en el suelo.

Con estas pruebas sobre la mesa y a pesar de las constantes e insuficientes protestas de Claude sobre su inocencia fue declarado culpable el 20 de agosto de 1992 por matar a su novia, así como condenado a cadena perpetua. Pero esta resolución se vería como una "basura" después de que un juez reabriera el caso tras años de apelaciones por parte de Claude. El juez de la Corte Penal, Monte Watkins, quién reabrió el caso, concluyó la nueva sentencia afirmando que: "El tribunal está convencido de que el peticionario ha presentado pruebas claras y convincentes que demuestran que ningún jurado razonable habría condenado a Claude Garrett por homicidio grave a la luz de las nuevas pruebas científicas".