Los símbolos que se esconden en la capilla ardiente del papa Francisco: del palio a la casulla roja
El lunes 21 de abril, el papa Francisco falleció en su residencia de Santa Marta, a causa de un derrame cerebral que le provocó el coma
Su cuerpo sin vida ya se encuentra en la capilla ardiente de Santa Marta, a la espera de ser trasladado a la Basílica de San Pedro
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El pasado lunes 21 de abril a las 07:35 de la mañana, el papa Francisco fallecía en su residencia de Santa Marta. Tras su última aparición pública durante la tradicional misa de Urbi et Orbe del Domingo de Pascua, Bergoglio, que sufría una neumonía bilateral desde el pasado mes de febrero, comenzó a encontrarse mal, falleciendo finalmente de un derrame cerebral, tal y como informó la prensa italiana (y el parte médico). Tras su muerte, comenzó el protocolo para su despedida y funeral, que se celebrará el próximo sábado en Vaticano.
A la espera de ser enterrado, ya ha trascendido la primera imagen de su féretro, ubicado en la capilla de Santa Marta hasta que sea trasladado a la Basílica de San Pedro. En contra de lo que manda la tradición, el cuerpo de Jorge Mario Bergoglio, no ha sido embalsado, sino que solo ha recibido una serie de inyecciones para evitar su descomposición. Por expreso deseo de Francisco, fue colocado en un sencillo ataúd de madera y zinc y no en el catafalco utilizado para los pontífices anteriores.
La casulla, la mitra, el rosario y su anillo personal
El cadáver ha sido minuciosamente preparado para su encuentro con los fieles, apostados en la ciudad de Vaticano desde que se hizo pública la noticia. Por ello, Francisco luce la casulla roja, cuyo color simboliza el amor y también la sangre derramada por Cristo y que los sacerdotes suelen llevar para el Domingo de Ramos, el Viernes Santo, la Fiesta de la Cruz y Pentecostés. También lleva el palio, es decir, la prenda o estola blanca (en este caso, con cruces negras) que, generalmente, los sacerdotes se ponen sobre los hombros para repartir la hostia consagrada.
Sobre la cabeza, lleva la mitra blanca, la episcopal. En el pasado, en las ocasiones solemnes, los papas usaban una tiara, un tocado de metales preciosos compuesto por tres coronas superpuestas para indicar su triple poder: "Padre de príncipes y reyes, Rector del mundo, Vicario de Cristo en la Tierra". Pero la tiara fue abolida ya por Pablo VI, por lo que fue sustituida por el tradicional sombrero de los obispos.
Por último, además del rosario que le acompañará 'al otro lado', en el dedo anular de su mano derecha, Francisco lleva el anillo de plata que siempre usó en Buenos Aires. No se trata del famoso anillo de pescador que le entregaron al ser elegido, pues esa joya se funde inmediatamente después de la muerte de los pontífices, para forjar uno nuevo y entregárselo al nuevo sucesor.
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