El liberal Mark Carney, elegido primer ministro de Canadá impulsado por el efecto Trump y su guerra de aranceles
Las encuestas daban ventaja al Partido Conservador de Pierre Poilievre hasta los últimos meses que la tendencia comenzó a cambiar con las amenazas de Trump a Canadá
El candidato liberal y primer ministro en funciones, Mark Carney, que llegó a suceder a Justin Trudeau ha ganado las elecciones de Canadá apenas un mes y medio después de su victoria en las primarias de su partido
Mark Carney, un hábil banquero, el sustituto de Justin Trudeau en Canadá y el rival político de Donald Trump
El primer ministro Mark Carney, del Partido Liberal ha ganado las elecciones parlamentarias en Canadá, según han informado los principales medios de comunicación canadienses de forma provisional. El exbanquero de 60 años será el encargado de enfrentar la hostilidad de su vecino, Donald Trump y los aranceles que Estados Unidos ha impuesto a Canadá.
El candidato liberal y primer ministro en funciones, Mark Carney, que llegó a suceder a Justin Trudeau ha ganado las elecciones de Canadá apenas un mes y medio después de su victoria en las primarias de su partido y contra todas las encuestas que desde hace meses daban ventaja al Partido Conservador de Pierre Poilievre.
El regreso de Trump a la Casa Blanca, en enero, y el despliegue de la guerra comercial de Estados Unidos ha cambiado el sentido de los votos y los liberales supieron aprovechar la experiencia en el ámbito económico como exgobernador de los bancos de Canadá e Inglaterra, que en el contexto de guerra comercial convenció a los canadienses para que lo eligieran para dirigir el Gobierno.
Una victoria de los liberales de Trudeau para enfrentar al "matón" de Trump
El Partido Liberal, cuando se disolvió el Parlamento en marzo, gobernaba en minoría con 152 diputados. La oposición estaba formada por el Partido Conservador (120), el Bloque Quebequense (33), el Nuevo Partido Democrático (24), independientes (3) y el Partido Verde (2).
Mark Carney, durante la campaña electoral subrayó la intención de su Gobierno de plantar cara a Trump, porque, es necesario "enfrentarse a un matón". "Los estadounidenses quieren nuestros recursos, nuestra tierra, nuestra agua, nuestro país... Canadá nunca formará parte de Estados Unidos de ninguna forma", aseguró en su primer discurso cuando se convirtió en líder de su partido en marzo pasado.
Así lo 'leyeron' los electores canadiense , de los 28,5 millones votantes registrados decidieron fortalecerse como país ante las reiteradas amenazas de Donald Trump. Poco más del 43% de los votos han conseguido los liberales de Carney, seguidos de cerca por los conservadores tras meses liderando los sondeos.
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