Este 9 de mayo es el Día de la Victoria para Rusia mientras la guerra en Ucrania entra en su día 75. Los ataques de las tropas de Vladimir Putin se suceden, especialmente en el sur y el este del país. La buena noticia llega desde Mariúpol, donde se ha completado la evacuación de civiles, en total, unas 600 personas.
Ya ha caído la noche cuando llegan a Zaporiyia los últimos civiles, unos 40, de los refugiados en la acería de Azovstal. Voluntarios de la ONG World Central Kitchen han cocinado para ellos y les reparten algo caliente que llevarse a la boca.
Con la luz del día y con lágrimas en los ojos una maestra de 58 años entrega sus documentos al policía. Ha logrado dejar atrás el infierno de Mariúpol. Ha tardado tres semanas en llegar a Zaporiyia. "Yo trabajaba en una escuela, ahora ya no hay ni escuela ni nada"
Otra joven madre abraza a sus pequeños. Con lo poco que han podido salvar, tratarán de empezar una nueva vida.
Decenas de coches particulares van llegando a la ciudad con los evacuados. Atrás dejan los bombardeos de las fuerzas rusas y los separatistas prorrusos que han reanudado sus ataques el día después de que el Kremlin diera por acabada una operación para evacuar a los civiles del complejo.
Quienes se resisten a dejar la sitiada ciudad, se agolpan frente a un centro comercial ahora reconvertido en centro de ayuda humanitaria. Aún quedan combatientes ucranianos en el interior de la enorme acería de Mariúpol, bastión de la resistencia.