"Miré a Breivik a los ojos mientras él me disparaba tres veces"

Además, Andrine cree que el frío ayudó a coagular su sangre. Entonces fue cuando fingió estar muerta y sobrevivió en el agua durante 30 minutos. Ahora, la joven cuenta desde el hospital que tuvo cara a cara a Anders Breivik.

"Miré al asesino a los ojos mientras él me apuntaba con su arma directamente y me disparó tres veces", cuenta la joven. El primero de los disparos impactó en el lado derecho de su pecho y le perforó el pulmón. Luego fue alcanzada en el hombre y, finalmente, Breivik le apuntó al pie.

Andrine fingió estar muerta en ese momento. Una reacción instintiva que le salvó la vida. Su madre Randi Thomsen, una inspectora de Hacienda, estaba de vacaciones en Bulgaria con su pareja cuando ocurrió la masacre.

La madre de la joven cuenta a hora que su hija estaba en la cafetería del campamento cuando comenzó el tiroteo . En ese momento, Andrine salió corriendo hacia la playa pero no logró encontrar un buen escondite. Desde allí saltó al agua, una decisión que ayudó a salvarle la vida ya que el agua fría favoreció que no perdiese mucha sangre.

"Fue una experiencia terrible" cuenta la madre de la joven que aún está hospitalizada. Randi Thomsen explica que "en el hospital había muertos a su alrededor" y que "algunos de ellos eran sus amigos". CGS