Edyan Farah, de 28 años, había quedado con un amigo pero no tenía con quién dejar a sus cinco hijos de entre uno y siete años. Así, decidió encerrarlos en un armario de su casa hasta que regresara.Cuando Farah volvió a la vivienda después de diez horas encontró los cadáveres de Zuhur, su hija de cinco años, y Zakariya, otro de sus descendientes de tres años.
Un familiar de Farah fue el que dio la voz de alarma tras observar un comportamiento extraño en la mujer.
Según ha declarado, el hombre se personó en la vivienda pero la madre no le dejó entrar por lo que miró por la ventana y observó lo que parecía ser el cadáver de un niño en el sofá.
Tras certificar la muerte de los menores, las autoridades detuvieron a Edyan Farah por los hechos. En su primera declaración, la mujer aseguró que no estaba en su sano juicio en el momento del incidente.
Según han publicado algunos medios como el Daily Mail, la mujer incluso había puesto una cama delante de la puerta del citado armario para que los menores no pudieran salir.
Un portavoz policial ha señalado que los tres hijos supervivientes, de uno, cinco y siete años, se encuentran en varios hogares de acogida. EPF