Una persecución policial en Estados Unidos ha terminado de la peor manera para los agentes. Sufrieron un grave accidente antes de poder alcanzar al sospechoso. A pesar de que consiguieron esquivar todos los vehículos que se encontraron a su paso, no pudieron evitar chocar contra un coche que se encontraron de repente. A pesar del impacto, nadie resultó herido.