Alemania, convencida de que el brote de coronavirus en el país es “controlable”

  • El sistema sanitario alemán no se ha visto colapsado en ningún momento, explican

  • Alemania realiza más de 350.000 test por semana y los laboratorios pueden incluso doblar esa cifra

Las medidas aplicadas, las restricciones y los resultados obtenidos hacen que Alemania se manifieste convencida de que el brote de coronavirus en el país es “controlable”. Según ha expresado el ministro de Sanidad alemán, Jens Spahn, el “frenazo total” que acordó hace cuatro semanas el gobierno federal y los distintos estados federados ha sido un “éxito”.

Concretamente, ha explicado, se ha pasado de un crecimiento dinámico de contagios a una evolución lineal, subrayando que en ningún momento el sistema sanitario alemán se ha visto colapsado, lo que ha resultado fundamental para que el impacto del coronavirus no sea tan dramático como sí lo está siendo en otros países.

Seis de cada siete casos se han atendido de forma ambulatoria

En ese sentido,el ministro de Sanidad alemán ha querido poner énfasis también en la "estrecha red" de consultas médicas y médicos de familia que han contribuido a la atención de los contagiados, señalando que seis de cada siete casos se han atendido y acompañado de forma ambulatoria.

Del mismo modo, destaca el gran trabajo realizado en los hospitales, donde han sido capaces de ampliar el número de camas en UCI hasta 40.000, si bien ha advertido que 10.000 camas libres actualmente no se podrán mantener disponibles por tiempo indefinido.

A este respecto, señala al "difícil equilibrio" de mantener camas libres para posibles contagiados por coronavirus y retomar las operaciones aplazadas, que para los afectados suponen una "carga psicológica", de manera que anunció el regreso a una "nueva normalidad" en las clínicas a partir de mediados de mayo.

Alemania realiza más de 350.000 test por semana

El trabajo de Alemania está dando grandes resultados. En total, acumulan más de 138.000 casos y las muertes se sitúan por encima de 4.000, un dato –este último-- que es mucho más inferior que el de otros países europeos con similares números de contagiados. La razón del menor impacto del coronavirus en este aspecto, señalan, está en un extraordinario trabajo en la realización de test y la detección de los contagiados y sus contactos. Sanidad confirma que han realizado más de 1 millón 700 mil test y hacen 350.000 a la semana, aunque, ha dicho, los laboratorios pueden incluso doblar esa cifra, La cuestión, recuerdan, es que existen límites marcados por la capacidad de la red sanitaria para practicarlos.

Además, el Instituto Robert Koch de virología anunció que el número de nuevos contagios por coronavirus causados por una persona infectada ha caído en Alemania por debajo de 1, un valor fundamental que se persigue para poder hablar de una remisión de la epidemia. La propia Angela Merkel se refirió a ello esta semana recalcando su importancia.

Más allá, el director del citado instituto, Lothar Wieler, matizó que "no es la única cifra” que manejan, insistiendo en que lo importante ahora es que se mantenga estable por debajo de 1.

Preguntado por cuántos casos puede haber sin que sean conocidos, Wieler reconoció que de momento no se pueden dar cifras pero ha valorado que, en caso de que haya realmente diez veces más de los registrados, eso daría un total de unos 1,3 millones de personas infectadas (sobre una población de casi 83 millones), "lo que no es tanto", según ha declarado.

La lucha por conseguir mascarillas.

En cuanto a la escasez de mascarillas, tan necesarias para "los que luchan en el frente" contra el coronavirus, Spahn informó de que esta semana llegaron a Alemania 80 millones de unidades, entre ellas 20 millones del tipo FFP2 para el personal sanitario, e insistió en que la prioridad del Gobierno no es de momento obligar a llevar mascarillas sino que se confía en la "responsabilidad" de los ciudadanos para reconocer su utilidad sin tener que imponer su uso.

Además, anunció bonificaciones para unas cincuenta empresas alemanas que a partir de mediados de agosto fabricarán alrededor de 10 millones de mascarillas FFP2 y 40 millones de tipo quirúrgico por semana.

El ministro aseguró que Alemania quiere "hallar gradualmente el equilibrio adecuado entre protección de la salud, vida pública y economía" y "paso a paso el camino hacia una nueva normalidad".

"Tenemos que aprender a convivir con el virus", dijo, y se mostró convencido de que Alemania tiene "buenas oportunidades de superar bien ese periodo de epidemia".