La misma madre de la niña llevó a la niña al 'Rainbow Babies and Children's Hospital' de Cleveland tras observar en ella un comportamiento "inusual". Tras varias pruebas, los médicos comprobaron que la bebé presentaba una tasa de alcoholemia en sangre de 0,25 mg/l, esto es el triple de lo establecido en EEUU para conducir, 0,08 mg/l.
La madre de la bebé declaró a los investigadores de la Unidad de Crímenes Sexuales y Abuso Infantil del departamento de Policía de Cleveland que la dejó al cuidado de una tía alrededor de las 9 horas del domingo antes de irse al trabajo y cuando regresó a las 17:30 horas notó que la niña no reaccionaba como siempre y parecía estar muy cansada, según 'The Washington Post'.
Tanto la madre como la tía de la menor han declarado que no saben cómo la niña pudo ingerir el alcohol, sin embargo la abuela de la niña dijo posteriormente a los investigadores que sospechaba que algún miembro de su familia podría haber puesto alcohol en el biberón de la bebé porque estaba llorando y no se dormía.
Por su parte, la Policía no ha revelado la identidad de las personas involucradas en el caso ya que no se han presentado cargos. No obstante, ha abierto una investigación y se ha notificado del incidente a los servicios infantiles, según 'cleveland.com'.
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