El daño bíblico de la guerra comercial de Trump contra China

  • Más de la mitad de la producción bíblica mundial tiene lugar allí. Hay cálculos que apuntan a 150 millones de Biblias al año.

Estados Unidos y China se han dado una tregua comercial, mientras avanzan las turbulentas negociaciones. Y más vale que lleguen a un acuerdo, han advertido las editoriales religiosas estadounidenses. Porque los aranceles que el presidente Donald Trump promete imponer a las importaciones chinas si las conversaciones fracasan, causarán una subida del precio de la Biblia, debido a que la mayoría se imprimen en China. La guerra comercial podría llegar a resultar en una escasez de Biblias en Estados Unidos, asegura HarperCollins Christian Publishing, uno de los principales grupos editores del país. Calculan que alrededor de un 75% de sus gastos de manufactura son en China, y aseguran que no tienen otra opción.

Las Biblias se imprimen en China

La razón es simple: imprimir Biblias es muy caro, por la extensión, la complejidad de las ilustraciones y porque tienen que ser impresas en papel muy fino y para ello hacen falta máquinas especializadas. Y desde hace décadas se trasladó a China. Más de la mitad de la producción bíblica mundial tiene lugar en allí. Hay cálculos que apuntan a 150 millones de Biblias al año.

Las dos grandes editoriales de Biblias en Estados Unidos son Zondervan y Thomas Nelson, que pertenecen a HarperCollins. Juntos suponen el 38% del mercado bíblico del país.

“Las impresoras estadounidenses trasladaron sus instalaciones de impresión de la Biblia al extranjero hace décadas, sin dejar grandes alternativas de fabricación domésticas“, asegura el presidente de la compañía, Mark Schoenwald. Las dos grandes editoriales de Biblias en Estados Unidos son Zondervan y Thomas Nelson, que pertenecen a HarperCollins. Juntos suponen el 38% del mercado bíblico del país. Schoenwald compara los aranceles con un “impuesto a la Biblia“ para consumidores y organizaciones religiosas.

Más de la mitad de la producción bíblica mundial tiene lugar allí. Hay cálculos que apuntan a 150 millones de Biblias al año.

Los editores testifican en el Congreso y piden ayuda

Diversos grupos editoriales testificaron el mes pasado ante el Congreso para explicar el negativo impacto que supondría la guerra comercial para el sector. Y han solicitado a la administración estadounidense que retire las Biblias y otros libros religiosos de la lista de aranceles, en un mensaje al Representante Comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer. Advierten que los potenciales aranceles del 25% se aplicarían a todos los libros, pero afectarían específicamente a Biblias y libros infantiles.

La Biblia es el libro más vendido en Estados Unidos (y en el mundo) con más de 8 millones de ventas en 2018, según el grupo de investigación de mercado NPD. Aunque la cifra no incluye las copias que se venden directamente a las congregaciones y los números totales pueden ser bastante más altos. “Creemos que la administración no conocía el potencial impacto negativo de los aranceles en el sector“, explica Schoenwald.

De momento, Trump ha dejado en el aire la imposición de aranceles contra China a la espera del avance de las negociaciones entre Washington y Pekín.