Christian Brueckner, el depredador sexual y pedófilo que la policía alemana sospecha que mató a Madeleine

  • Los padres de Madeleine aún se aferran a encontrarla con vida

  • La policía alemana que ha logrado descubrir nuevas pistas investiga el caso como homicidio

La policía alemana investiga el caso de Madeleine como homicidio no como desaparición como hace la británica. Un jaguar, una llamada antes de la desaparición y un sospechoso han dado un vuelco al caso. El hombre de 43 años que ahora es el principal sospechoso es Christian Brueckner, un pedófilo y narcotraficante alemán encarcelado el año pasado por violar a un turista estadounidense de 72 años en Praia da Luz. Los casos se remontan a 2005. La víctima fue atada, amordazada, con los ojos vendados y azotada con un bastón de metal antes de ser violada durante 15 minutos. Disfrutó torturándola.

"Creemos que Madeleine McCann está muerta y estamos pidiendo testigos". El sospechoso de 43 años es un depredador sexual múltiple ya condenado por crímenes contra niñas pequeñas. Scotland Yard todavía trata a Madeleine como desaparecida. Los amigos del sospechoso le acusan de tener vídeos de sus violaciones. Su identidad está protegida en Alemania pero los medios británicos han desvelado ya su nombre.

El delincuente sexual infantil condenado pasó 12 años en el complejo del Algarve. Los investigadores creen que traficaba con drogas, robaba en casas de vacaciones y turistas. La policía alemana reveló que el sospechoso había llegado al Algarve en 1995 a los 18 años, un destino común para los mochileros adolescentes del país. Durante los siguientes 12 años vivió en Praia da Luz y en los alrededores de Lagos, diciéndole a la familia que estaba trabajando como proveedor de catering.

Scotland Yard reveló que un hombre con el pelo corto y de color claro fue visto acechando cerca del apartamento en cuestión el día en que secuestraron a Madeleine. Y esa descripción coincide con el aspecto del sospechoso que ya estuvo en la lista de las primeras investigaciones pero fue finalmente descartado. En abril de 2007 el sospechoso se mudó de una casa de campo a una autocaravana ahora vinculada al crimen.

El 3 de mayo de 2007, Madeleine McCann es secuestrada alrededor de las 10 p.m. de su cama mientras sus padres comen tapas con amigos a unos metros de distancia. El teléfono móvil de Brueckner lo coloca en el área esa noche. Regresa a su Alemania natal poco después de eso. Es inusual la revisión de los móviles tantos años después como reconocen los investigadores, pero es una de las pistas que sostiene la sospecha.

Entre 2008-2016 nuestro hombre entra y sale de la cárcel por tráfico de drogas y delitos de abuso infantil contra 'niñas pequeñas'. En 2017, con el caso de nuevo en los medios, el hombre confiesa a un amigo que sabe todo sobre el caso Madeleine y le mostró un vídeo de una violación. El amigo acude a la policía.

En junio de 2017. el hombre regresa a Portugal pero es extraditado nuevamente a Alemania. La razón fue una sentencia del tribunal de distrito de Braunschweig a 15 meses de prisión por el abuso sexual de un niño. En agosto de 2018 sale de prisión y vive en la calle.

En septiembre de 2018 sigue el hilo de detenciones de Brueckner, que ahora es arrestado en Milán y extraditado a Alemania y juzgado. La coincidencia de ADN con el cabello encontrado en la escena de la violación de 72 años le señala. En diciembre de 2019 está encarcelado durante siete años después de ser condenado por violación y extorsión. El 3 de junio de 2020 Scotland Yard y la policía alemana revelan que han identificado a un sospechoso en el caso Maddie McCann. Los padres de la pequeña aún confían en que esté viva. Pero al menos, saber lo que pasó puede estar más cerca.