Al menos tres personas han perdido la vida y otras siete se encuentran en paradero desconocido debido a los voraces incendios que se están sucediendo en Australia desde hace semanas y que ya han arrasado miles de hectáreas.
El primer ministro Scott Morrison ha advertido de que la cifra de fallecidos podría aumentar en los próximos días. Hasta el momento, más de 70 incendios han sido declarados en diversos puntos de Australia, destruyendo 150 viviendas y dejando a 30 personas heridas.
El estado de Nueva Gales del Sur es el más afectado. Efectivos de los Bomberos Rurales de este estado han señalado que es la primera vez que se enfrentan a una situación de estas características, ya que nunca antes se habían producido tantos incendios de manera simultánea.