Una menor narra la tortura que sufrió: secuestrada y violada, la obligaron a vivir con el cadáver de su bebé

  • La menor embarazada se mudó a casa de su novio, un año menor que ella

  • Durante meses, sufrió abusos físicos, psicológicos y sexuales

  • Su pareja mató al bebé y guardó el cadáver en la cómoda de la habitación

Yanelith Coaquira es una menor peruana de 17 años que ha narrado la tortura que ha sufrido tras ser víctima de un secuestro y abuso sexual mientras estaba embarazada. Además según recogen medios peruanos, ella fue testigo del asesinato de la bebé que esperaba y tuvo, incluso, que convivir con el cadáver durante días. La Fiscalía Provincial Civil y Familia de Huancané, en la región de Puno, ha abierto una investigación en la que ha incluido a los padres del agresor.

Su pesadilla comenzó en el mes de julio de 2019 al enterarse de su embarazo en el cuarto mes del mismo. Aceptó entonces la propuesta de su novio, de 16 años, de irse a vivir con él a su casa. Una vez ya instalada en su nuevo hogar, Yanelith fue golpeada y violada en varias ocasiones por su pareja sentimental, ambos menores de edad, y por el padre del agresor.

Pero el martirio de Yanelith fue a más cuando nació su hija en el mes de noviembre del año pasado. Su pareja la obligó a dar a luz en la habitación donde la mantenía secuestrada y fueron los padres de él quienes la atendieron en el parto. "Me dijeron que era una niña y me puse feliz cuando vi su carita y la escuché llorar. Luego creo que me desmayé porque no recuerdo nada”, cuenta la menor, según recoge 'El Comercio'.

Fue ya al despertar cuando la joven se percató de que la pequeña estaba muerta. Su pareja le reconoció que la había ahorcado con una cinta. "Tardó en morir como dos horas", le dijo y metió el cadáver dentro de una bolsa que introdujo en el cajón de una cómoda.

Desde ese día, las palizas y las violaciones fueron a más hasta que Yanelith puedo comunicarse con su hermana y pedirle que acudiesen a rescatarla. Tras la denuncia a la Policía, el 22 de enero las autoridades registraron la vivienda y hallaron a la joven encerrada en la habitación de la que salía un olor fétido. Además, dentro de la cómoda, encontraron el cuerpo de la bebé en estado de putrefacción. El cadáver llevaba ahí más de dos meses.

La pareja de Yanelith está ahora internada en un centro de menores por presunto abuso sexual, secuestro y parricidio, pero solo permanecerá ahí tres meses, en tanto que los padres, a quienes la joven acusa de ser cómplices, permanecen en libertad aunque están siendo investigados.