Una joven, de 27 años, es la segunda víctima mortal en Venezuela. Tras recibir un disparo en la cabeza en las masivas protestas contra Nicolás Maduro del Primero de Mayo, que ha dejado más de medio centenar de heridos.
Sin piedad, contra los manifestantes y hasta contra los periodistas, las tanquetas de la policía bolivariana han reprimido con extrema dureza a los miles de venezolanos que han salido a las calles de Caracas y otras ciudades del país.
Querían apoyar a Juan Guaidó tras la liberación del líder opositor Leopoldo López. "Creo que queda absolutamente claro que el usurpador perdió", ha dicho el autoproclamado presidente del Venezuela. Manteniendo el pulso, Guiadó llama a una huelga general y asegura que va a seguir liberando presos políticos.
Mientras, Nicolás Maduro, que también ha movilizado a los suyos, ha dicho que “esta escaramuza golpista la dirigieron personalmente desde la Casa Blanca" y culpa a Estados Unidos de estar detrás de la incertidumbre y violencia que se vive en Venezuela.