Los supervivientes de la masacre en Hanau, Alemania: "Disparaba a la cabeza de todo el mundo"

  • Tobias Rathjen, de 43 años, abrió fuego indiscriminadamente en dos bares de Hanau

  • "Fue una auténtica masacre", cuentan los testigos de los tiroteos

  • El asesino, un ultra racista, grabó un vídeo conspirativo

Antes de su último acto de locura asesina, el ultra racista que ha acabado con la vida de 10 personas, –incluida su propia madre–, en una cadena de tiroteos en Alemania, grabó un vídeo de locura conspirativa. Después, el horror: en pleno centro de Hanau, al lado de Frankfurt, abrió fuego indiscriminadamente en un bar frecuentado por musulmanes.

Cuando los equipos sanitarios atendían a los heridos, se oían disparos unos metros más lejos: el asesino estaba actuando en otro local y dejando más muertos; nueve en total. No cabía una ambulancia más en la zona.

"Una auténtica masacre"

Fue una auténtica masacre”, cuenta un testigo. “Disparaba a la cabeza de todo el mundo”, añade uno de los supervivientes.

Poco después, la policía encontraba el cadáver del asesino, Tobias Rathjen, de 43 años, en su casa, junto al de su madre, de 72.

En su manifiesto, mezcla de fanatismo y perturbación, Rathjen habla de sociedades secretas y de bases militares subterráneas que rinden culto al diablo, utilizando siempre toda la retórica supremacista blanca en contra de negros, judíos, musulmanes y mujeres.

Las autoridades no le habían investigado antes de este ataque. Rathjen era cazador y tenía licencia de armas.

"El racismo y el odio son venenos que están en la sociedad"

“El racismo y el odio son venenos que están en la sociedad”, ha lamentado y advertido la canciller alemana, Angela Merkel, tras el trágico suceso.

En Alemania los atentados de este tipo aumentaron un 20% en 2018. Hace solo una semana 12 alemanes eran detenidos por planificar atentados a gran escala contra mezquitas.

Hasta ahora, el peor atentado había sido el cometido por un joven germano-iraní en un centro comercial de Múnich en 2016, con 9 muertos, pero todo apunta a un fenómeno más amplio: el terrorismo de extrema derecha, que golpea a varios continentes.