¿Qué es una terapia macrobiótica como a la que ha ido Tamara Falcó?
La terapia macrobiótica fue creada por el filósofo japonés George Ohsawa
La idea de la dieta macrobiótica es evitar los alimentos que son tóxicos o que contienen tóxicos
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Tamara Falcó ha confesado uno de sus nuevos propósitos que está llevando acabo en 2024: seguir la terapia de macrobiótica. Se trata de una dieta basada en la filosofía oriental con la que, según la hija de Isabel Preysler, ha adelgazado los kilos que había cogido durante la Navidad. Y es que es muy importante diferenciar entre los alimentos que son saludables y los que no. Aunque siempre nos pueden surgir dudas, sobre todo con todos los tipos de dietas que existen como, por ejemplo, la vegana.
La palabra Macrobiótica proviene del griego “Macro” y significa ‘largo’ o ‘grande’. “Bio” se refiere a vida. La dieta macrobiótica fue desarrollada hacia 1920 por el filósofo japonés llamado George Ohsawa, quien consideraba que si comemos simple y sano se puede vivir en armonía con la naturaleza y sus cambios.
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¿En qué consiste la dieta macrobiótica?
La terapia macrobiótica es una dieta ideada hacia la salud y el bienestar, que contiene bajos niveles grasos y glicémicos, y es alto en fibras. No está pensada para adelgazar, aunque se acompaña de una disminución de los depósitos de grasa, mejorando así la satisfacción de las personas. El objetivo de esta terapia es evitar los alimentos tóxicos o que contienen tóxicos.
Existen diferentes variantes en este tipo de dieta. Algunas personas que deciden seguir esta dieta son vegetarianas y otras prefieren incluir pescado o carne en menor proporción. Siguiendo la idea del filósofo japonés, vivir en el orden natural significa comer cuando es necesario y lo que es necesario. Es decir, tenemos que aprender a ajustar nuestra alimentación a nuestras necesidades y nuestros cambios.
¿Qué alimentos se pueden comer con esta terapia?
La terapia macrobiótica se centra en los alimentos integrales y naturales, poniéndole el énfasis en los granos enteros, las verduras, legumbres, algas y pescado. En cambio, se evitan o se reducen al mínimo los alimentos procesados como carnes rojas, lácteos y alimentos muy refinados.
Su estructura se basa en el equilibrio del Yin y el Yang. En el primero, entran aquellas comidas ligeras y frías. En el segundo, las pesadas y calientes. Los expertos recuerdan llevar cuidado con las dietas estrictas por su efecto rebote.
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