La enfermedad de la rabia: formas de contagio y síntomas de un virus letal que inflama el cerebro
La rabia es un grave problema de salud pública que afecta a más de 150 países, principalmente en Asia y África, según la OMS
Muere el paciente aislado por rabia en una UCI de un hospital de Valencia
La noticia sobre la muerte de un español infectado por la rabia ha desatado todas las alarmas. La enfermedad infecciosa estaba erradicada desde hacía años y el último caso diagnosticado en nuestro país era de 1978. Nos surgen muchas interrogantes en torno a esta enfermedad que transmiten numerosos animales que nos rodean y que afecta el sistema nervioso. ¿Cómo se produce el contagio de la rabia y cuáles son sus síntomas?
La infección al ser humana es causada por el virus de la rabia, según la web médica de Clínicas Mayo. La rabia se propaga por medio de saliva infectada a través de una mordida o una herida en la piel, pero a veces basta un arañazo para que el virus penetre en nuestro cuerpo.
El virus viaja desde la herida hasta el cerebro, donde provoca una inflamación, que es la que provoca los síntomas de la enfermedad. Cada año mueren a causa de la rabia unas 59.000 personas, la mayoría niños de países, principalmente en Asia y África, de acuerdos a los datos de la OMS.
La enfermedad de la rabia: cómo se contagia
La rabia se transmite a través de la saliva de un animal que esté infectado y hay cuatro vías para el contagio a humanos.
- Por mordedura. Es la manera más habitual de contagio si el animal está infectado
- Por arañazos. Puede ocurrir por un simple arañazo de un animal infectado que provoque sangre
- Por contacto de la saliva con tejidos o fluidos. En este caso la transmisión ocurre si el humano entra en contacto con la saliva u otro fluido de un animal infectado.
- Si el animal infectado lame cualquier herida de una personas.
Animales que transmiten la rabia
Los animales más propensos a trasmitir la rabia en los Estados Unidos y contrariamente a lo que se piensa, no es patrimonio exclusivos de los perros, aunque es una vía más habitual en los países del tercer mundo.
La rabia puede ser transmitida por los murciélagos, coyotes, zorros, mapaches, ardillas y zorrillos. En los países en desarrollo, los perros callejeros son los más propensos a trasmitir la rabia a las personas.
Los síntomas de la rabia
Los primeros síntomas de la rabia pueden ser muy similares a los de la gripe y pueden durar días, una razón por la que muchas veces el diagnóstico se retrasa agravando la situación de los enfermos.
Los síntomas posteriores pueden incluir: fiebre, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, agitación, ansiedad, confusión, hiperactividad, dificultad para tragar, excesiva salivación.
Los enfermos también puede sufrir alucinaciones, miedo al agua, insomnio y parálisis parcial.
Los tratamientos contra la rabia, una vez que el paciente tenga los síntomas, son poco efectivos y la enfermedad es letal en la mayoría de los casos. En los documentos médicos apenas se registran unos 20 casos documentados de supervivencia.